Ha sido decisiva en el marcador final y en el pase del Bilbao Basket a la siguiente ronda una canasta de dos de Alex Mumbrú a 1.6 segundo del final. Después ha fallado adrede el tiro libre adicional del que disponía para obligar a que hubiese rebote y el Oldenburg no dispusiese de un tiro cómodo sobre el último bocinazo.

A solo nueve minutos del final parecía casi imposible la clasificación bilbaina, ya que tras un demoledor parcial de 4-21 los visitantes se habían puesto 9 puntos arriba (57-66). Que en realidad eran 13 porque los vizcainos necesitaban ganar por cinco.

Con todo casi perdido, el Bilbao Basket ha tirado del orgullo y la determinación que le caracterizaban en años anteriores y ha logrado un pase agónico pero que ha inundado de alegría el Bilbao Arena.

En ese tramo decisivo, además de Mumbrú (22 puntos y 19 de valoración), han sido claves Germán Gabriel (21, 7 rebotes y 24) y varios triples muy importantes de Damir Markota y Dairis Bertans, que al final ha podido jugar.

Entre todos ellos han minimizado una noche no demasiado afortunada de Raúl López (4 pérdidas y 2 asistencias) y han neutralizado canastas claves de Julius Jenkins (20 y 21) y Dru Joyce (18, 8 asistencias y 22). El serbio otrora aspirante a estrella Nemanja Aleksandrov (13 y 6 rebotes) ha sido el tercer pilar del conjunto alemán, que se ha desplomado sobre la cancha tras certificar una eliminación casi increíble.

El partido ha comenzado con dos malas noticias para el Bilbao Basket. La primera, la peor, la segunda falta de Raúl López en solo 2:36; la segunda, un parcial de 0-8 visitante (4-9) que ha invalidado la ligera ventaja que ha cogido de inicio (4-1). Se ha recuperado el conjunto local y le ha devuelto la moneda al Oldenburg (12-9) en un primer cuarto a tirones (14-11, 16-14, 16-21) que ha terminado con empate a 21.

Otro 8-0 en el arranque del segundo cuarto (29-24) ha dado por primer vez a los bilbainos una ventaja que les clasificaba, cinco puntos de ventaja de los que ha vuelto a gozar en dos ocasiones más antes de empezar la segunda mitad.

Primero se ha puesto 44-39 y después ha alcanzado el 46-41 con el que se ha llegado al descanso gracias a un rebote ofensivo sobre la bocina de Mumbrú, el mejor de los 20 primeros minutos (14 puntos).

Ha amagado con escapada el Bilbao Basket a vuelta de vestuarios de la mano de Gabriel, a pesar de la tercera falta de Raúl, y se ha marchado hasta por 8 puntos en dos ocasiones (50-42, 53-45). Pero ha respondido el Oldenburg para dejar las cosas casi como al principio a 15 minutos del final (53-52).

El choque ha parecido ladearse hacia el lado alemán, ya que los de Machowski han encadenado un 4-16 que les ha dejado 4 puntos arriba -en realidad 9, por su victoria en Alemania- de cara al último cuarto.

Cinco puntos seguidos visitantes (57-66) han estirado el parcial a 4-21 desde el 53-45 y han dejado la heroica como única opción para los de Pueyo, que debían remontar 14 puntos en 9 minutos.

Y lo han hecho. Aunque superando muchas dificultades, la anotación de Jenkins y Joyce, y con una canasta en escorzo bajo el tablero de Mumbrú que le ha hecho estallar de alegría, al igual que a sus compañeros y a los 8.500 espectadores que han acudido a Miribilla.

Unos aficionados que podrán seguir disfrutando de basket europeo en el Last 32 de la Eurocopa. Algo difícil de explicar tras cinco derrotas seguidas de su equipo y un último triunfo lleno de agonía.