
Ignacio Ugarteche ha declarado hoy como imputado ante el juez Pablo Ruz, que investiga los posibles delitos económicos cometidos por el PP en su financiación. Ha rechazado haber abonado los 100.000 euros pero no ha explicado por qué su nombre aparece en las anotaciones de Bárcenas. Tampoco por qué su antigua empresa, Urazca, recibió la concesión para construir un parking en Madrid por la cantidad de 4 millones de euros apenas nueve días después del 21 de marzo de 2007, cuando está registrado el pago en el cuaderno. Una extraña ampliación de territorio si se tiene en cuenta que Urazca estaba prácticamente centrada en obras realizadas en la CAV.
Sobre esta obra, ha entrado en contradicción cuando, en un primer momento, ha negado conocer a Alberto Ruiz Gallardón, actual ministro de Justicia y entonces alcalde de la capital española. Posteriormente ha tenido que admitir que se habían visto en el palco del Santiago Bernabéu, el estadio del Real Madrid.
El expresidente del Athletic también ha rechazado haber financiado la sede del PP en Bilbo, cuya contabilidad fraudulenta fue presentada por Bárcenas en la documentación aportada el 15 de julio ante el juez. También ha indicado que nunca pagó por seguridad para la formación unionista. «¡Suficiente teníamos con garantizar nuestra propia seguridad!», ha afirmado.
Además de Ugarteche, hoy han declarado como imputados los empresarios José Luis Suárez, Joaquín Molpeceres y Ramón Aigé. Mañana prosiguen los interrogatorios y, entre quienes pasarán por el despacho de Ruz se encuentra el presidente de Les Corts valencianas, Juan Cotino, que acude en calidad de testigo.

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