A pesar del contundente marcador y de lo merecido que ha resultado, los de Ernesto Valverde han tenido que sufrir durante más de una hora. Sobre todo por el gol de Oscar González que ha abierto el marcador al cuarto de hora. Pero, en la segunda parte Ibai Gómez, con dos goles, Óscar de Marcos y Ander Herrera han dado la vuelta a un marcador que ha cerrado Valdet Rama con un golazo sobre el tiempo reglamentario.

Con esos dos tantos, los primeros que marca como titular, Ibai se coloca máximo goleador de su equipo en Liga, con 6 tantos marcados.

El resultado de este lunes permite al Athletic, además de recuperar la cuarta plaza, ampliar a 8 puntos su ventaja sobre el séptimo clasificado, y ya 14 sobre el octavo, las que pueden ser las primeras posiciones en quedarse fuera de Europa.

El Valladolid, por su parte, ha ahondado en la mala imagen de sus últimas salidas, con 12 goles en contra en tres partidos, a 4 por encuentro. Los Juan Ignacio Martínez no han aprovechado ni lo mucho que les ha dado el fútbol en la primer mitad: un gol afortunado y en fuera de juego, varios errores arbitrales a favor y desacierto ante Diego Mariño del equipo rival. Su castigo es seguir en puestos de descenso y a tres puntos de la permanencia.

Un par de ocasiones en el minuto de Herrera, llegando desde atrás para que Mariño mandase a córner, e Ibai, rematando alto desde la frontal, han avanzado el asedio al que iba a ser sometido el área visitante durante la primera mitad.

Un continuo ataque rojiblanco que ha arreciado tras el gol de Oscar al cuarto de hora de partido, un tanto en fuera de juego ya que el balón le ha llegado al centrocampista pucelano después de que lo tocase a su lado Javi Guerra, que no ha podido controlar en primera instancia un disparo mordido desde la derecha de Ebert.

Una idea de lo que estaba sucediendo en San Mamés lo daba que a los 25 minutos el Athletic ya había botado ocho córneres y el público había pedido penalti en sendas manos de Ebert y Bergdich y un empujón a Aduriz al borde del área. Ninguna de esas acciones ha sido sancionada.

Ya con algunos contraataques visitantes de por medio, el empuje local ha continuado hasta el descanso, con varias ocasiones, de Aduriz, Herrera, Susaeta e Ibai, y tres saques de esquina más provocados para llegar a los once al final de la primera mitad.

No han cambiado las cosas en el inicio del segundo tiempo. Si acaso que Mariño, acertado pero no muy seguro en la primera parte, ha puesto otro muro más a salvar por el Athletic, que se ha encontrado con grandes paradas del meta gallego en sus dos primeras ocasiones, ambas claras de Beñat e Iraola.

El primero con un tiro desde la frontal y el segundo finalizando con el exterior una buena internada desde el vértice del área.

Aunque ha vuelto Mariño a su costumbre de despejar los disparos que le llegaban de lejos y ha echado hacia un lado un lanzamiento de Aduriz desde fuera del área. Por allí ha aparecido Ibai, completamente solo, y con la tranquilidad suficiente para colocar el balón cruzado por entre las piernas de Bergdich y fuera del alcance del portero rival.

Había hecho lo más difícil el Athletic ante la defensa ultranza, aunque no demasiado contundente, del Valladolid. Y ha continuado en la misma línea, con Ibai metiendo y metiendo balones al área. No siempre y acertados y casi siempre bien defendidos por los centrales visitantes.

Pero el extremo rojiblanco ha enganchado uno bueno desde el vértice izquierdo hacia Aduriz, que ha salido en el momento adecuado para no caer en fuera de juego y dejar la pelota franca para que De Marcos fusilase a Mariño.

No se ha quedado ahí Ibai, que ha decidido el choque con otro disparo parecido al del primer gol tras recibir un buen pase de Aduriz y entrar al área, incisivo, por la izquierda.

Aún quedaba por cerrar el 4-2 final con la plasmación de la goleada con un tanto de Herrera a centro de De Marcos que ha supuesto el 4-1 y un golazo del serbio Valdet Rama tras espectacular colada por la banda izquierda.

La página especial de NAIZ sobre fútbol ofrece información adicional sobre el encuentro.