Sobre la cancha sólo ha existido un equipo y ese ha sido el campeón de Europa, que ha gobernado a su antojo el partido liderado por Spanoulis, ante un Baskonia impotente. Como ha señalado Scariolo al final del choque, «hay que saber quiénes somos y contra quien jugamos».
Los gasteiztarras estaban además mermados por las bajas de Hanga y San Emeterio. Tras un inicio al ralentí, Spanoulis sacó la batuta para dirigir y anotar diez puntos en un parcial de 1-13 en los cuatro minutos finales del primer cuarto (15-26).
El Baskonia se ha desangrado entre el final del primer acto y el arranque del segundo. En ocho fatídicos minutos solo ha anotado seis tiros libres mientras Olympiacos disfrutaba sobre la pista para anotar 25 y romper el marcador (20-38, m.14).
Las diferencias no se han quedado ahí y han seguido creciendo, con 38-59 en el descanso y 40-70 en el minuto 24. Con el partido sentenciado, los griegos han levantado el pie y al final han permitido a los locales bajar de los veinte puntos de desventaja (70-89). Scariolo ha aprovechado para hacer debutar en la Euroliga al joven canterano de 18 años Carlos Martínez.
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