Según publican diversos medios de la capital española, los hechos han sucedido en la Gran Vía madrileña, cuando Aguirre ha aparcado su vehículo, un Toyota blanco, en un carril bus. Cuando uno de los agentes se ha acercado al coche pidiéndole la documentación para imponerle una multa, la expresidenta de la Comunidad ha arrancado y se ha dado a la fuga, tirando en su maniobra la moto del policía.

“El País” explica que el motorista implicado y un coche de la Policía Municipal han perseguido a Aguirre hasta ponerse a su altura para pedirle que detuviera el vehículo, pero ella ha hecho caso omiso y ha continuado hasta su vivienda, en el barrio de Malasaña, entrando directamente al garaje.

Entonces han salido de la casa dos guardias civiles que realizan tareas de vigilancia y escolta y han ofrecido a los municipales presentar toda la documentación y rellenar un parte de accidente. Estos han reclamado la presencia de Aguirre, que ha permanecido en el interior, por lo que han acudido a comisaría para denunciar a la líder del PP por daños y por darse a la fuga, además de la multa por aparcamiento indebido. 

«No había nada de tráfico»

«Lo único que querían era la foto multándome», ha asegurado Aguirre en conversación telefónica con el diario ‘ABC’, al que ha explicado que había parado «un minuto» en el carril bus para sacar dinero de un cajero. «A esa hora no había nada de tráfico, ni un alma», ha indicado.

En el rotativo ‘El Mundo’ señalan que Aguirre sí ha entregado la documentación a los agentes,  que estos le han impuesto la multa y que ella se ha marchado sin permiso al considerar que la estaban reteniendo sin motivo.

‘ABC’ añade al respecto la versión de la expresidenta madrileña: «Les he dicho que si necesitaban algo más que vinieran a casa... Y se han presentado siete policías».