
Reza el dicho que la venganza se sirve en plato frío. Cuatro años ha tardado Holanda en tomarse la revancha de la derrota en la final del Mundial disputado en Sudáfrica en 2010. Pero la espera les ha merecido la pena. Cinco goles, cinco, han sido los que los tulipanes han endosado a una España que durante la segunda parte ha sido un juguete roto.
Y eso que el choque inaugural para ambas escuadras en esta Copa del Mundo arrancaba con un guión repetido. Snaijder se plantaba en solitario ante Casillas y disparaba al muñeco en el minuto 7, España mandaba con su tiki-taka y Diego Costa amagaba, hasta que en el 27 un recorte, una caída y once metros. Un penalti discutible, y discutido, que Xabi Alonso convertía en gol. Una película vista antes.
Pero en la recta final de la primera mitad dos jugadas, un minuto, marcaban el devenir del choque. Silva marraba el 2-0 con una picadita ante la que aguantaba el portero rival y, a renglón seguido, balón de Blind desde la banda izquierda para un estético testarazo en plancha de Van Persie al fondo de las redes. Empate a uno y al vestuario. La anécdota se daba en la pantalla televisiva, donde en la celebración de la hinchada holandesa se ha visto a un joven con una camiseta de Brasil y una bandera por la repatriación de los presos vascos.
La segunda mitad ha sido un festival naranja, ante la complacencia de los centrales hispanos –Ramos y Piqué– y la actuación de un Casillas que es carne de picota. Robben ha pinchado un balón largo para resarcirse de su error de hace cuatro años (m.52, 1-2). Once minutos después De Vrij ha rematado el 1-3 al saque de una falta –el meta español reclamaba un empujón– y a partir de ahí la vigente campeona ha sido un muñeco de trapo al que Holanda ha golpeado una y otra vez sin compasión. Van Persie y Robben han completado sus respectivos dobletes para cerrar una manita.
Duro golpe para el combinado español, no solo por los cero puntos, sino también por la forma en que ha llegado la derrota. Pero no se puede olvidar que hace cuatro años fue campeón tras caer ante Suiza en el primer partido y que lleva seis años cosechando éxito tras éxito. El miércoles le espera Chile en un choque sin margen de error.
Chile sufre para derrotar a Australia (3-1)
En el otro encuentro del grupo B, Chile se ha impuesto con apuros a Australia (3-1). Y eso que el choque no ha podido comenzar de mejor manera para la selección sudamericana, que ganaba por 2 a 0 antes del cuarto de hora. Primero Alexis aprovechaba un mal despeje de la defensa para marcar, y seguidamente el atacante del Barcelona se sacaba de la chistera una gran jugada individual para asistir al Valdivia, quien enviaba la bola a la red con un colocado disparo.
Pero Australia no ha bajado los brazos y poco a poco ha ido imponiendo su físico. El monólogo de La Roja ha pasado a ser un ida y vuelta con llegadas de peligro en ambas áreas. Pasada la media hora, los oceánicos han logrado premio con una jugada que han repetido constantemente a lo largo del encuentro, llevar el balón a una banda para centrar en busca de la cabeza de Cahill (2-1). El veterano ex del Everton, ahora en las filas del Red Bull New York, ha sido una pesadilla para los centrales chilenos.
En la segunda parte Australia ha dominado, mientras Chile se defendía con orden. La ocasión más clara ha sido abortada con una gran parada abajo de Claudio Bravo. Con el pasar de los minutos Chile ha dispuesto de metros para correr, pero no ha marcado el tercero hasta ya rebasado el minuto 90 con un duro disparo de Beausejour. Página especial de Naiz.info.

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