El Ejército de Israel ha bombardeado esta noche varios puntos de la zona de los Altos del Golán controlada por Siria, en respuesta a la muerte de un adolescente israelí por la explosión de un proyectil extraviado procedente de territorio sirio que impactó contra un coche que circulaba por el lado israelí de la frontera, según ha confirmado el Ejército.

El fallecido es hijo de un trabajador del Ministerio de Defensa israelí que se dedicaba a reforzar la valla fronteriza. El padre del chico ha resultado herido de gravedad por la explosión, ocurrida cerca de la localidad de Tel Hazaka. Además, otras dos personas han resultado heridas de diversa consideración, de acuerdo con esos medios.

El incidente ha sido calificado por Israel como el más grave en esta zona del Golán desde que empezó el conflicto sirio en 2011. El teniente coronel Peter Lerner, responsable del Ejército para medios extranjeros, ha indicado que el «ataque de ayer fue sin provocación y un acto de agresión contra Israel y la continuación directa de recientes ataques ocurridos en la zona».

Por su parte, el Observatorio Sirio para los Derechos Humanos ha informado de que al menos diez militares del Ejército sirio han muerto en los bombardeos