NAIZ
BARCELONA

Mas apela a la «concordia» y dice que todo está listo para el 9N

El president catalán, Artur Mas, ha hecho un llamamiento a la «concordia» y a respetar todas las opiniones en la Diada, y ha asegurado que lo tiene «todo listo» y el «dispositivo preparado» para la celebrar la consulta del 9 de noviembre, para lo que firmará un decreto tras aprobar la Ley de Consultas.

Artur Mas ha participado esta mañana en la ofrenda floral ante el monumento a Rafael Casanova. (Quique GARCIA/AFP)
Artur Mas ha participado esta mañana en la ofrenda floral ante el monumento a Rafael Casanova. (Quique GARCIA/AFP)

Artur Mas ha presidido el primer acto institucional de la jornada de la Diada, en el que 300 violonchelistas han recordado en un acto musical a los fallecidos en la Guerra de Sucesión del 11 de setiembre de 1714.

El president catalán ha hecho hincapié en que todos sus esfuerzos están centrados en el 9 de noviembre, sin entrar directamente en esta cuestión.

«Lo tenemos todo listo. Tendremos la Ley de Consultas, firmaremos un decreto y el dispositivo está preparado para poderlo hacer. Estamos listos», ha incidido.

Antes de realizar la tradicional ofrenda floral ante el monumento a Rafael Casanova, ha pedido que se viva la Diada desde el «respeto» y la «tolerancia», porque «todas las opiniones son válidas» y «necesitan ser escuchadas».

Ha pedido asimismo al Gobierno español que hoy tome «el pulso» de las movilizaciones en la calle, pero que no lo vea como «un pulso» al Estado sino como un «clamor de una gran parte de la sociedad catalana de que el mensaje que se está lanzando es que se quiere votar para decidir el futuro político en un plano de concordia y de entendimiento con los pueblos de España».

Mas ha dicho que ve al Gobierno de Mariano Rajoy «inmóvil» y sin «iniciativa política» en el asunto catalán y ha señalado que le «sorprende porque es uno de los más grandes temas de Estado».

Ha opinado que el Ejecutivo del PP debería «moverse» y abandonar la actitud de «decir ‘no’ a todo», y ha advertido de que es un «error intentar resolver a través de la arquitectura legal un problema genuinamente político».