El juicio, presidido por el magistrado Fernando Grande Marlaska, ha durado unas dos horas con un único testigo de la acusación, el jefe de la Brigada de Información, que ha declarado por videoconferencia. La defensa, que ha pedido la libre absolución, ha llevado a varios testigos que han ratificado la misión informativa de la web de Burlata.

El mando policial ha reconocido que se abrieron diligencias después de que Burlataherria se hiciera eco de una rueda de prensa de electos en la que se criticaba la política penitenciaria. No obstante, esta acción pública de los electos también fue recogida por otros medios de comunicación. En consecuencia, las únicas pruebas de cargo que se tenían contra el portal informativo eran aquellos referidos a la terminología que se empleó en algunos de los artículos.

Una veintena de vecinos de Burlata se han desplazado hasta Madrid para apoyar al administrador de la web. Además de ello, desde Sortu se ha emitido un comunicado en defensa de la actividad de Burlataherria y del derecho a la libre expresión.