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AKÇAKALE

Turquía abre la frontera a los huidos de Siria que el EI intenta retener

Turquía abrió el paso fronterizo de Akçakale y comenzaron a pasar algunos de los miles de huidos de los combates en Siria. Cuando los yihadistas trataron de impedirlo, los desplazados quisieron forzar otro paso en la valla, pero fueron rechazados por fuerzas turcas.

Las fuerzas de seguridad turcas intervinieron ayer contra grupos de refugiados sirios que cruzaban por un paso no regulado de la frontera mientras varios yihadistas intentaban impedir en el lado sirio que las familias pasaran a Turquía.

Los incidentes se produjeron en el paso fronterizo de Akçakale, en la provincia de Sanliurfa, donde miles de refugiados sirios esperaban desde hace días para cruzar a Turquía. Huyen de los combates en al cercana ciudad de Gire Spi (Tel Abyad en árabe), donde los combatientes kurdos asedian a los yihadistas del Estado Islámico (EI). El sábado el Ejército turco se lo impidió utilizando cañones de agua, y pasaron la noche entre los combates y los alambres de espino. Con temperaturas que durante el día pasan de los 35 grados, muchos pedían agua a quienes esperaban al otro lado.

Después de haber mantenido cerrado el paso fronterizo durante días y asegurar que solo lo abrirían «en caso de emergencia humanitaria», ayer a mediodía las autoridades turcas abrieron el cruce, pero solo pudieron pasar cuatro familias con sus efectos personales en bolsas antes de que hombres armados, que la emisora NTV identificó como miembros del EI, impidieran el paso a los demás.

Un grupo derribó entonces la valla en un punto cercano pero no pudo cruzar el foso fronterizo y se desplazó hacia un campo de minas, momento en el que las fuerzas turcas acudieron para impedirles que atravesaran el lugar.

Al mismo tiempo, grupos de ciudadanos turcos acudieron a la valla y la policía intervino para mantener despejada la zona fronteriza. Finalmente, sobre las 15.30 hora local, los refugiados agolpados en el lado sirio pudieron empezar a cruzar de forma ordenada.

En las últimas dos semanas, unos 15.000 refugiados sirios han cruzado a Turquía por el paso de Akçakale, según estima NTV. El viernes pasado, el Gobierno cifró en 13.500 el número de refugiados que llegaron a Turquía a través de ese paso desde comienzo de este mes.

Parte de la población permanecía en Gire Spi, situada en la provincia de Raqa, principal bastión del EI en Siria.

 

Las YPG llegan a las puertas de Tel Abyad

Las fuerzas kurdas llegaron ayer a las puertas de Gire Spi (Tel Abyad en árabe), de donde tratan de expulsar al Estado Islámico (EI), que controla esta ciudad en la frontera turco-siria. Gire Spi tiene población kurda y árabe y es un importante punto de entrada de armas y combatientes de los yihadistas. Después de cuatro días de avances, las Unidades de Protección del Pueblo (YPG), apoyadas por fuerzas rebeldes sirias y bombardeos de la coalición que lidera EEUU, llegó a 50 metros de la entrada de la ciudad. Miles de habitantes se desplazaron hacia la frontera turca y otros hacia Raqa. Poco antes, las YPG habían entrado en la cercana población de Suluk y comenzaron a desactivar los artefactos explosivos colocados por los yihadistas, que la abandonaron después dos días cercados. Con esta nueva conquista, que incluyó varias localidades más en el camino a Gire Spi, las fuerzas kurdas tratan de cerrar el paso de suministros del EI desde su bastión de Raqa, a la vez que apoyar al vecino cantón kurdo de Kobane, más al oeste, donde aún permanece el EI. GARA