Arturo PUENTE
BARCELONA
Entrevista
DOLORS SABATER
NUEVA ALCALDESA DE BADALONA

«La ciudad no está fracturada por la inmigración sino por la pobreza»

Dolors Sabater, alcaldesa de Badalona, afirma que «la confluencia se ha hecho a fuerza de necesidad, empujados por un retroceso social y político. Podem, la CUP y la gente de luchas en la calle entendió que una ciudad como Badalona, con emergencia social, debía dejar de estar en manos del partido de los recortes».

Una fuerza de confluencia gobernará la primera, tercera y quinta ciudad de Catalunya. ¿Qué ha pasado?

Lo que está pasando en todos los sitios, se nos ha corrompido este modelo de democracia y la gente ha empezado a tomar la palabra. 15-M, proceso soberanista, las marchas… la gente ha dicho basta. En Badalona ha prendido algo especial porque los últimos cuatro años han sido extremos en temas de participación, recortes, igualdad o derechos. Todo eso ha hecho que haya ganado el cambio en Badalona.

A priori, la CUP y Podemos tienen dos proyectos muy diferentes. Pero en muchas ciudades han surgido candidaturas a las que se han sumado ambas. ¿Cómo ha sido el proceso de confluencia en Badalona?

En primer lugar porque han visto importante la suma en clave de unidad popular. La cultura política más clásica es la de las cuotas de poder, pero aquí se empezó pensando en el empoderamiento y encontrarnos en lo que coincidimos. Podem, la CUP, y tambien la gente de luchas en la calle, entendió que una ciudad como Badalona, obrera, con emergencia social, debía dejar de estar en manos del partido de los recortes de derechos sociales y políticos, y que eso no lo resolvían los partidos clásicos. La confluencia se ha hecho a fuerza de necesidad, empujados por un retroceso social y político que se notaba en la piel.

Llega a la Alcaldía apoyada por un pacto amplio de toda la izquierda. ¿Ha sido muy difícil convencer a las demás formaciones?

La verdad es que no. Los partidos con los que pactamos llevaban en el programa desbancar a Albiol de la Alcaldía. El propio Albiol ha planteado las elecciones en clave de plebiscito, era una idea sobre la mesa antes de las elecciones. Hubiera sido un engaño al electorado que este pacto no se diese. Otra cosa es cómo hacemos el gobierno y qué fuerzas entran.

Una vez echado Albiol, ¿teme que la necesidad de buscar apoyos entre fuerzas como el PSC pueda diluir el potencial rupturista de su candidatura?

No tengo miedo porque las negociaciones las hemos hecho en base al programa. Está claro que sin apoyos no podemos gobernar, pero también está claro que no gobernaremos si no podemos llevar adelante nuestro programa. Tenemos asegurado gobernar con ICV-EUiA y ERC porque hay coincidencia en los compromisos y en el código ético de gobierno, y nos hemos esforzado para que al PSC le resulte cómodo apoyar a un gobierno así. El objetivo ahora es poder gobernar y sacar adelante medidas que la ciudadanía reclama.

El proyecto nacional podría no ser prioritario en unas municipales. Sin embargo Guanyem Badalona apostó muy pronto por firmar el manifiesto independentista de la ANC.  

Hemos concebido Guanyem Badalona como un punto de encuentro entre federalistas e independentistas. Nuestro compromiso es que la gente pueda decidir todo tipo de temas políticos, no solo temas de ciudad. La relación de Catalunya con el Estado es algo que ha de estar en las manos de la gente. La idea de un proceso constituyente hacia una República Catalana es una idea que ha unido mucho a Guanyem Badalona, y este punto de encuentro es el que hemos querido poner de manifiesto como un acuerdo muy trabajado, trasladándolo al gobierno municipal.

El cambio de un alcalde del PP a uno de Guanyem, ¿se notará desde el primer día con acciones contundentes o prevén una transición escalonada?

La idea es hacer una transición tranquila con golpes de efecto, en sentido de que hay acciones simbólicas que transmiten mejor que nada que aquí han cambiado las cosas.

En el programa han puesto el acento sobre el gasto social. ¿Qué es lo urgente?

En Badalona ha habido una enorme falta de gasto social, que ha provocado una bolsa de pobreza importante. Los ejes prioritarios son la alimentación y la pobreza energética, dos indicadores de pobreza muy básicos y a los que hemos de hacer frente este verano. Sabemos que hay niños que se alimentan en los comedores escolares y, con el verano encima, esto es una prioridad. Ahora mismo la acción más importante es hacer un diagnóstico de emergencia sobre estos indicadores y resolverlos.

El hecho de que una candidatura con un discurso racista haya ganado las elecciones refleja un problema de fondo. ¿Qué se puede hacer desde la Alcaldía para atajar esto?

La gente de Badalona no es racista. Eso se demuestra en muchísimas cosas, una regidora de Guanyem Badalona es de origen marroquí y de creencia musulmana, una de las grandes fobias de Albiol. Pero no todo el que vota a Albiol es racista, tenemos mucho respeto por los votantes del PP de Badalona. La ciudad no está fracturada por la inmigración sino por la pobreza. Y esta fractura no tiene clave de origen. Lo que ha pasado es que una parte de la población que ha llegado ha pasado a engrosar las bolsas de pobreza, y esto ha sido atizado como un factor de competición por la supervivencia. Así, tenemos el laboratorio encendido, aunque en realidad la gente no sea racista.

Una de sus prioridades es cambiar la composición del gobierno, cambiar las áreas por líneas de actuación. ¿Qué quiere decir?

No queremos que las fuerzas políticas que hemos pactado nos repartamos áreas, sino que tengamos la capacidad de formar un gobierno transversal por programas. La idea es conformar áreas mixtas entre las fuerzas, con cargos políticos y técnicos de confianza mezclados, como una forma de acercar la acción de gobierno a la gente. Esto es un objetivo del 78 que nunca se ha conseguido y por lo que apostamos de forma clara.