Oihane LARRETXEA
DONOSTIA

Un informe vuelve a rebajar los usuarios del Metro de Donostialdea

Un nuevo informe sobre el mal llamado Metro de Donostialdea, el tercero en seis años, rebaja de 23 a 19 millones los usuarios anuales de Euskotren tren en Gipuzkoa (en 2011 se habló de 35). Solo el nuevo trazado por el centro generaría 13.464 trayectos diarios, siendo Dbus la gran perjudicada, con 3,44 millones de viajes menos al año.

Siguen bailando, y mucho, las cifras sobre el número de usuarios que tendría el mal llamado Metro de Donostialdea tras la posible construcción de la pasante por el centro de la ciudad. Un nuevo informe realizado por la empresa Ingartek, a petición de la Autoridad Territorial del Transporte de Gipuzkoa, y al que ha tenido acceso GARA, estima que Euskotren tren generaría en el territorio al año 19 millones de viajeros.

Se intuye que las instituciones, decididas a acometer el proyecto, siguen buscando números que no suenen utópicos, un colchón que justifique la pasante, porque el informe, que aún no se ha hecho público, es el tercero que se realiza sobre esta obra ferroviaria desde 2011, y rebaja más aún las predicciones precedentes.

El Estudio de Viabilidad encargado hace seis años por el Gobierno de Lakua hablaba de 35 millones de pasajeros anuales, y tres años después, en 2014, Euskal Trenbide Sarea (ETS) rebajó esta cifra hasta los 23 millones de viajeros anuales, según sus propios cálculos.

Este último estudio también ha medido la «demanda inducida» que generaría en el año 2020 la propia construcción de los 4,2 km soterrados entre Lugaritz y el Centro: 13.464 nuevos usuarios diarios. La estimación de Ingartek se basa en los «nuevos desplazamientos por el aumento de la frecuencia de los viajes» y en los desplazamientos que se realizaban hasta entonces en otros modos, como en vehículo privado, en bicicleta o a pie. En este sentido, el informe apunta que 4.399 personas dejarían de utilizar el coche cada día en favor del metro, mientras que 2.018 dejarían de ir en bici o paseando en favor de este transporte.

En el apartado de la movilidad inducida, también recoge que la nueva infraestructura generaría al día 7.047 nuevos viajes. No obstante, se trataría de usuarios habituales de otro transporte público, probablemente del autobús, que lo abandonarían para decantarse por el metro o tren.

Y en ese sentido, así lo recoge el documento, sin duda las grandes perjudicadas son las compañías de autobuses, especialmente Dbus, que dejaría de transportar cada día a unas 9.500 personas; es decir, perdería algo más de 3,44 millones de usuarios al año (un 11,31% de su actividad anual).

Las líneas 5 (Benta Berri), 13 (Altza) y 28 (Amara-Hospitales) serían las más perjudicadas, con pérdidas del 20%, 11% y 12,4% de viajeros, respectivamente.

Lurraldebus perdería unos 3.400 viajeros cada día, con especial incidencia negativa en Ekialdebus (2.021 viajeros menos ) y TSST (1.317 menos).