La protesta, en la que tomaron parte unas 200 personas, había sido convocada con motivo de la inauguración del Foro Global sobre Democracia Directa Moderna –celebrado en el Ayuntamiento de Donostia– con el fin de denunciar la «nula voluntad de las instituciones para promover la participación ciudadana» en el proyecto del Metro de Donostialdea.

Según denuncia Satorralaia en una nota, la persona que se encargó de comunicar la protesta a la Ertzaintza ha sido multada por el Departamento de Seguridad del Gobierno autonómico con una sanción de 100 euros «por el mero hecho de que el lugar de la concentración se trasladó» desde su primer emplazamiento, en la calle Ijentea, «a la entrada del ayuntamiento de Alderdi Eder».

El cambio de lugar se produjo «al tener conocimiento de que los y las participantes del foro iban a utilizar dicha entrada para acceder al Ayuntamiento». Otra razón fue que en Ijentea la gente que tomaba parte en la protesta y las pancartas de diferentes colectivos «se hubieran topado con el tráfico» que entra y sale de la zona del puerto.

«Con el cambio a la zona peatonal del Alderdi Eder los y las congresistas tuvieron además la oportunidad de leer las diferentes pancartas y hablar directamente con la gente de los movimientos sociales. Los y las participantes internacionales lo agradecieron mucho y se quedaron mucho tiempo fuera para discutir e informarse de primera mano de la situación en Donostia», añade este colectivo.

Sin embargo, el Departamento de Seguridad ha decidido aplicar la Ley Mordaza «para multar los movimientos sociales por reclamar más democracia».