Paliza, repaso, vapuleo… el diccionario de sinónimos no da abasto para calificar lo visto en París, donde el PSG ha sido infinitamente superior a un Barcelona desnortado al que solo una gesta mantendrá vivo en la Liga de Campeones.
El primer asalto de los octavos de final ha sido una exhibición de los dirigidos por Unai Emery. Di María ha abierto el marcador de libre directo, y Drexler ha hecho el segundo antes del descanso. En la reanudación, otra vez el ‘Fideo’ y el uruguayo Cavani han redondeado la goleada.
Al otro lado, un Barça permisivo en defensa e ineficaz en ataque, desconectada su tripleta ofensiva. Esta derrota es de las que dejan consecuencias.
En el otro encuentro de esta jornada, el Benfica lisboeta viajará a Dortmund con ventaja gracias al gol de Mitroglou nada más comenzar la segunda parte. El Borussia ha podido empatar desde los once metros, pero Aubameyang no ha acertado.