«Me pilló de sorpresa. Estaba en casa tan tranquilo. Me llamó el presidente para comunicarme la noticia (el lunes). Es una alegría inmensa y la sensación de haber cumplido un sueño», ha declarado Barja en rueda de prensa tras el entrenamiento en Tajonar.

El extremo de Noain, de 20 años, lleva en Osasuna desde los 8 años y tras destacar esta temporada en el filial, donde ha marcado ocho goles, pasará a ser profesional en el primer equipo, una decisión adoptada en principio por el nuevo director deportivo que todavía no ha sido anunciado por el club, sin haber tampoco nuevo entrenador.

«Eso no me tiene que condicionar», ha dicho Barja, quien independientemente de si es del agrado del técnico de la próxima temporada ha destacado que «tiene que hacer» lo que sabe y «esperar» su «oportunidad».

Barja, con contrato hasta 2021, con dos años más opcionales y una cláusula de rescisión de cuatro millones de euros al subir al primer equipo, ha admitido que no ha tenido «ninguna oferta» de otro club y ha añadido que espera aportar «ilusión, trabajo y mucho descaro y verticalidad» la próxima temporada.

A pesar de sus buenos números esta campaña en el filial no ha tenido oportunidades en el equipo profesional, a diferencia de otros jugadores. «Poder debutar en el primer equipo es el sueño de cualquier canterano, pero no se ha dado por las circunstancias», ha indicado.

«Este año ha sido el que más he explotado. He hecho buenos numeros, pero el primer equipo es otro mundo y la Primera División es muy complicada. Hay que estar muy bien preparado para estar ahí y respeto las decisiones de los entrenadores», ha comentado.

El futbolista rojillo ha lamentado el descenso de Osasuna a Segunda División, pero ha indicado que para un canterano el salto es «menor» en este caso desde el filial: «Me puedo asentar mejor, pero necesitaré un periodo de adaptación para dar el rendimiento que he tenido en el Promesas o incluso mejor».

«Cualquier osasunista quiere ver a su equipo en la máxima categoría. Es una lástima el descenso, pero para la gente de la cantera es más fácil dar el paso a Segunda que Primera. Para mí es más sencillo, aunque la prioridad del club es estar en Primera», ha observado.

Barja, que cree que hay más jugadores en el filial que pueden dar el salto al primer equipo, ha señalado que debe tener «mucha cabeza» en su estreno en el fútbol profesional.

«En los momentos buenos no creerme que estoy en el cielo y en los momentos malos no creer que estoy bajo tierra. Debo ser constante y pensar en lo mejor para mí para dar el máximo», ha agregado.

El jugador rojillo, que cursa trabajo social en la Universidad Pública de Nafarroa, ha subrayado por último la importancia para él de seguir estudiando: «Parece que si eres futbolista no puedes estudiar una carrera y desde aquí animo a cualquier chico que juegue a fútbol a que no se olvide de los estudios porque es esencial», ha señalado.

«Los estudios son lo primero a pesar de que tenga ahora una ficha profesional. Trataré de sacar la carrera para en el futuro trabajar de lo que me gusta», ha finalizado.