El Departamento de Seguridad de la CAV ha activado la alerta naranja por la posibilidad de que se produzcan nevadas a nivel del mar. Según informó citando fuentes de Euskalmet, los chubascos irán entrando desde el mar. No se descarta que en ocasiones tengan carácter tormentoso y vayan acompañados de granizo de tamaño pequeño.

Además, el viento soplará de norte, con rachas intensas en el litoral y áreas de montaña, lo que se traducirá en «mucho frío». Las máximas apenas llegarán a los 2 o 3 grados en el interior y oscilarán los 5 o 7 grados en el litoral. En el caso de Gasteiz y Guardia se espera que el mercurio baje hasta los -2 grados en los momentos más fríos.

Y la cosa no parece que vaya a mejorar mañana, ya que Euskalmet apunta que «seguirá el frío». Así, las precipitaciones continuarán durante la primera mitad del día, especialmente en el oeste de la CAV, con una cota de nieve que podría situarse entre los 100 y los 300 metros. Por la tarde subirá hasta los 500 o 600 metros.

Se espera que la nubosidad disminuya durante la noche del jueves y la madrugada del viernes, lo que puede provocar heladas generalizadas en puntos del interior. Durante la segunda mitad del viernes la llegada de un frente puede traer nuevas precipitaciones y nevadas a cotas bajas que se prolongarán durante la primera mitad del sábado.

En el caso de Nafarroa, Aemet mantiene activado para hoy y mañana el aviso amarillo por nieve y frío.Las temperaturas máximas se situarán entre los 4 grados previstos en Iruñea y los 6 en Tutera. Cabe destacar el caso de Erronkari, donde se espera una mínima de -4 grados.

Problemas de tráfico

La mejoría prevista para el domingo pondrá punto y final a un temporal que ayer obligó a cerrar el puerto de Urduña para vehículos articulados. Y fue necesario el uso de cadenas en Opakua y Herrera. Además, las autoridades recomendaron extremar la precaución en una veintena de puertos de la CAV, así como en algunas vías de la red primaria, como la autovía de Altube (N-622) y la AP-68.

En Nafarroa los principales problemas se dieron en la zona de Pirineos. Debido a la nieve fue obligatorio el uso de cadenas para circular por la carretera NA-137, que conecta Isaba con Ipar Euskal Herria. También fue necesario el uso de cadenas a partir del kilómetro 4 de la NA-7510, en San Miguel de Aralar. A estos problemas se unió un desprendimiento en la NA-4150, entre Goizueta y Hernani.