«Yo voy a intentar por todos los medios poder estar ahí, en el campo porque todavía quedan cinco días. Ya veremos», ha remarcado el de Lodosa en el acto de despedida que ha tenido lugar en la sala de prensa de Anoeta, después de que el club notificara que no va a renovarle el contrato.

El lateral derecho, de 32 años y al que los problemas físicos han lastrado en las últimas campañas, ha asumido que la falta de oferta para seguir se enmarca dentro de la dinámica del fútbol profesional, «porque aquí no se hacen las cosas por caridad». Además, en su puesto el club cuenta para esa demarcación con jugadores como Odriozola, Elustondo, el cedido Zaldua o Gorosabel en el filial.

«Todavía no he asimilado la noticia y me va a costar mucho no ir a Zubieta y ver a mis compañeros, ni levantarme pensando en la Real porque es mi vida, llegué con 14 años y nunca he salido de aquí», ha declarado emocionado el lateral diestro, que ha estado arropado por compañeros y cuerpo técnico.

Carlos Martínez debutó en 2007 con el primer equipo y ha disputado 208 partidos, entre los que ha destacado el del ascenso a Primera como el mejor recuerdo de su carrera.

También ha tenido un recuerdo para los fallecidos Xabier Flores y Mario Soldevilla,con quienes compartió vestuario en las categorías inferiores, y para el preparador físico Juan Carlos Samaniego, Tximist, muerto en enero de 2016.

Aunque no ha pensado todavía en su futuro, ha subrayado que no es «mayor» y que confía en seguir jugando en la Liga española. «Me gustaría jugar contra la Real porque así podría jugar en el nuevo estadio», ha añadido.

«Es la segunda despedida después de la de Xabi Prieto. Carlos entró en el año 2000 en la Real y es toda una vida entera», ha recordado el presidente del club Jokin Aperribay, quien le ha agradecido«haber entregado lo mejor para que la Real avanzara y creciera».

Aperribay ha remarcado que jugadores como Carlos Martínez representan los «valores de una generación» y le ha agradecido su intachable conducta profesional.