GARA
MINBEJ

Incertidumbre en Minbej tras el ataque contra la coalición que lidera EEUU

La calma prevalecía ayer en la ciudad kurda de Minbej, en el norte de Siria, tras el ataque del ISIS contra la coalición que lidera EEUU que mató a cuatro estadounidenses y dibuja un panorama incierto ante la retirada de tropas anunciada por Donald Trump.

Minbej permanece en «máxima alerta» debido a la posibilidad de que se produzcan nuevos atentados, tras el cometido el miércoles por el Estado Islámico (ISIS) contra la coalición internacional que lidera EEUU que dejó 19 muertos, aunque ayer prevaleció «una tensa calma» en la ciudad, controlada por el Consejo Militar local, ligado a las Fuerzas de Siria Democrática (FSD), una alianza de milicias kurdo-árabes apoyadas por Washington. El ataque suicida augura un futuro incierto en Minbej ante la retirada de las tropas de EEUU y el consiguiente debilitamiento de las fuerzas kurdas que controlan la ciudad kurda.

La explosión mató a cuatro estadounidenses que integraban una patrulla: dos soldados estadounidenses, un civil que trabajaba para el Departamento de Defensa y un «contratista» (mercenario) que apoyaba al Pentágono. Es el primer ataque desde que EEUU anunciara la retirada de sus tropas el 19 de diciembre y después de que el día 11 de enero dijera que el proceso de repliegue en el norte de Siria había comenzado.

Barah Mikail, director de la consultora Stractegia, dijo a Efe que el atentado no significa un resurgimiento del ISIS, ya que en el último año y medio ha perdido mucha fuerza por la ofensiva de las FDS en el norte y este. Pero apuntó que la retirada de las tropas de EEUU de Siria ha sido una traición para las FSD. «El apoyo a nivel militar ha disminuido mucho», agregó Mikail, quien indicó que eso ha debilitado a las milicias, que han pedido ayuda al Ejército sirio.

«Nunca estaremos a salvo»

El senador republicano Lindsay Graham vinculó el atentado de Minbej a la decisión de Trump de sacar a sus tropas de Siria. A su juicio, el anuncio «activó el entusiasmo del enemigo contra el que estamos luchando», en referencia al ISIS. Señaló que a medida que el ISIS «se vuelve más audaz, la situación de las personas a las que tratamos de ayudar es más incierta. Lo vi en Irak y lo estoy viendo en Siria», y agregó que «nunca estaremos a salvo aquí a menos que estemos dispuestos a ayudar a las personas que se luchan contra la ideología radical».