Por primera vez desde que en agosto del año pasado una nueva ola pandémica acabó con el espejismo estival, aumentando los contagios y la presión asistencial a gran velocidad, los hospitales de Hego Euskal Herria atienden a menos de ciento cincuenta enfermos de covid-19.

Son en concreto 149, según los informes difundidos ayer por los Gobiernos de Lakua e Iruñea, 62 de los cuales se encuentran ingresados en las unidades de cuidados intensivos y 87 están en planta, donde la evolución está siendo especialmente rápida, pues hace solo una semana eran casi medio centenar más.

Son datos que ilustran la buena evolución en la cifra de contagios y que no se habían registrado en diez meses, desde que el repunte de casos detectado en julio empezó a cobrar forma de nueva oleada el mes siguiente, sobre todo en la CAV, ya que en Nafarroa la segunda embestida llegó más tarde, entre finales de agosto y primeros de setiembre.

En aquellas fechas, el aumento de los ingresos fue fulgurante, y en la primera semana de setiembre ya había cuatrocientas personas hospitalizadas, medio centenar de ellas en las UCI. Desde entonces, la presión asistencial ha ido evolucionando en función de la incidencia, con momento de gran tensión en los hospitales, pero no se había logrado bajar de los 150 pacientes covid. Hasta este miércoles.

Además, con once hospitalizaciones, diez en Osakidetza y uno en Osasunbidea, el miércoles también marcó un hito en el recuento diario de ingresos. Y en Nafarroa encadenan doce jornadas seguidas sin fallecidos.

Estos datos van de la mano de la mejora constante en la incidencia acumulada, que no acusa el alivio de las medidas y que está a punto de caer por debajo de los cien casos en Nafarroa.  

Reunión del LABI esta tarde

En la CAV, está previsto que el LABI fije esta tarde el nuevo marco normativo para las próximas semanas, tras pasar el martes del escenario de alerta tres al dos, de los cinco contemplados en el plan de contingencia de Osakidetza. El cambio se produjo al caer por debajo de los 150 casos de incidencia acumulada.

A este respecto, Gotzone Sagardui destacó ayer que ya hay una hoja de ruta establecida, el Plan Bizi Berri III, con los indicadores para modular las medidas preventivas, y sostuvo que será el informe elaborado ayer por de la comisión técnica del LABI el que marcará las pautas. En este sentido, ni la consejera de Salud y el lehendakari quisieron adelantar cuáles pueden ser los cambios en las restricciones.

Siendo seguro que se va a producir un alivio, la duda estriba en el alcance del mismo y en los sectores afectados, aunque se da por hecho que horarios y aforos de la hostelería van a verse ampliados por el nuevo escenario, y también se apunta a la reapertura de txokos y sociedades gastronómicas. Aunque los detalles los dará a conocer Iñigo Urkullu hoy, a partir de las 18.15 horas.

El contexto es propicio, con la afección del virus cada vez más limitada. Y en este escenario general, Gipuzkoa, el herrialde que más fuerte sufrió la última oleada de la pandemia, lidera esa mejora, pues ha logrado reducir la incidencia en seiscientos puntos en poco más de mes y medio; tocó techo con 730 casos por cien mil habitantes el 26 de abril, y ayer estaba en 118 casos, cerca de rebasar a Nafarroa como territorio menos afectado.