Osasuna quiere que a la novena sea la vencida y no repetir la mala racha de la campaña pasada que le tuvo trece jornadas sin conocer el triunfo. La escuadra navarra rinde visita a un escenario propio, cuyo anfitrión, el Getafe, se encuentra en puestos de descenso y en plena depresión tras la manita sufrida en el torneo copero ante un rival de Primera RFEF.

Como cabía esperar, dicho resultado ha enrarecido el ambiente en el entorno azulón hasta el punto de que cabe esperar que el recibimiento a los locales no sea muy propicio por parte de su propia parroquia, con la que, sin embargo, buscarán reconciliarse buscando una victoria frente a los rojillos.

Estos últimos no ganan en el Coliseum Alfonso Pérez desde finales de marzo de 2008. Desde entonces, cinco derrotas y cuatro empates atestiguan lo áspero que es arrancar algún punto en el feudo getafense. No lo va a ser menos por la actual situación del adversario.

No obstante, las buenas sensaciones que dejó el empate de última hora frente al Barcelona, que parecían olvidadas en las últimas jornadas, deberían servir de impulso para que la escuadra navarra concluyese el presente año con un triunfo que le permitiese sumar 25 puntos en su casillero y dejar a tiro de piedra la meta de la permanencia.

A ello hay que sumar la clasificación copera de entre semana, que aunque fuese ante un contrincante de menor nivel en estos momentos, se produjo contra todo un histórico como el Deportivo y además reaccionando con orgullo el bloque rojillo en la segunda parte.

No podrá contar el equipo con uno de sus baluartes, tanto en el aspecto defensivo como ofensivo. David García debe cumplir un partido de sanción tras ver su quinta amarilla ante los culés y, a buen seguro, que se le echará de menos por su contundencia atrás y capacidad goleadora a balón parado, con tres dianas ya en su haber.

El confinamiento de Aridane tras dar positivo en coronavirus deja muy pocas opciones a Arrasate para conformar su eje de la zaga que, si no hay sorpresa mayúscula de por medio, estará integrado por Unai García y Juan Cruz. Este último, que ejerció como lateral zurdo en el último encuentro, siempre ha sido central en defensa de cinco, por lo que será una nueva experiencia, si bien es una garantía el hecho de que el madrileño ha demostrado en las últimas jornadas que se encuentra en un buen momento de forma.

Arrasate: «Un rival que viene herido»

Jagoba Arrasate advirtió el viernes que el partido de este domingo «es muy importante», a la par que ante «un rival que viene herido después del resultado en Copa y que en Liga está mucho mejor». Reconoció que el equipo quiere irse al parón navideño «con buen sabor de boca».

Lograrlo será tarea complicada, pues se miden a un equipo «muy sólido», que también es «consciente» de lo mucho que hay en juego. «Hay que aprovechar las inercias. Venimos de empatar ante el Barcelona y de ganar en Copa», por lo que «debemos redondear la semana».

«Esas situaciones anímicas te dan confianza para estar más cerca de sacar un buen resultado», añadió el técnico de Berriatua, si bien matizó que «puede ser que nos esté costando llevar la iniciativa cuando no toca llevarla ante rivales en teoría inferiores. Creo que el domingo puede ser un 50%-50%».

Una deuda de casi 57 millones

Como cabía esperar dada la composición de la Asamblea de Socios Compromisarios, esta aprobó por aplastante mayoría el presupuesto para la 2021-22 –70 millones– y las cuentas de la pasada campaña –1,3 millones de beneficio–, pese a que estas últimas arrojan una deuda neta de 56,8 millones.

Una parte de dicho agujero económico lo ha justificado el presidente del club, Luis Sabalza, por el impacto de la covid, que «también nos ha causado un gran daño a nivel financiero» y que lo ha cifrado en 14 millones. «Hay clubes que están en una situación que se acerca a la quiebra. No es el caso de Osasuna, ya que el músculo financiero que habíamos adquirido estos últimos años nos ha servido para poder capear el temporal, pero esto no quiere decir que el temporal no haya hecho daño«, ha expuesto.

También ha argumentado que «es evidente que podríamos haber optado por reducir esa cifra con las ventas de, por ejemplo, dos jugadores de la casa que todos tendréis en mente. Sin embargo, la decisión de esta junta directiva fue renovarles. Osasuna no podía debilitarse si aspira a seguir creciendo».

También ha avanzado que se va a intentar a lo largo de la próxima temporada la recompra de una parte de Tajonar «para dotar a Osasuna de unas nuevas instalaciones que impulsen y refuercen el trabajo que se está llevando a cabo con la base».

Por otra parte, Alicia Martínez, María Esther Diñeiro y Enrique Rodríguez serán los componentes del Órgano para la Defensa del Socio, con Gabino Huici, Iñaki Velasco y Xabier Rebollo como suplentes. Del mismo modo, Miguel Salcedo, Ignacio Brun y Miguel Azcona formarán el Órgano de Disciplina Social, con Joseba Compains como suplente.