Manex Altuna

El «clásico» que más motiva a San Mamés llega condicionado por el coronavirus

El Athletic dispone de la ocasión de regalar una gran alegría a la afición para estas navidades en el cierre de un 2021 marcado por los altibajos. El Real Madrid, líder de la Liga en solitario, visita el estadio bilbaino en un partido adelantado por la Supercopa.

Berenguer es una de las bajas por coronavirus ante el Real Madrid. (Monika DEL VALLE / FOKU)
Berenguer es una de las bajas por coronavirus ante el Real Madrid. (Monika DEL VALLE / FOKU)

El Real Madrid es el rival que más motiva a la afición del Athletic históricamente. Es el verdadero «clásico» para San Mamés, un punto por encima que cuando se recibe al Barcelona o al derbi contra la Real. Marcelino ha comentado en la previa que le han dicho que es un partido «diferente» y que tiene ganas de vivirlo porque es «atractivo» e «ilusionante».

El equipo de Florentino y su Superliga representan el modelo del fútbol ante el que el conjunto rojiblanco se rebela, a pesar de que ambos clubes hayan juntado sus fuerzas junto al Barcelona contra el acuerdo de la Liga con el fondo de inversiones CVC.

El conjunto de la capital española siempre intenta fichar a los mejores jugadores del mundo, mientras el Athletic compite con los futbolistas de su tierra, de Euskal Herria, por decisión propia. La filosofía rojiblanca es motivo de orgullo cada vez que logra batir a un equipo como el madridista, que aunque ha perdido poderío económico ante equipos como City o PSG, sigue siendo el más laureado en cuanto a títulos.

Y las casualidades de la competición -el partido ha sido adelantado por la Supercopa- han propiciado que el equipo bilbaino despida el año en San Mamés contra todo un Real Madrid, líder en solitario del campeonato.

2021 ha estado marcado por los altibajos. Arrancó con la destitución de Garitano y la sorprendente victoria en la Supercopa de la mano de Marcelino. Los rojiblancos se impusieron al Real Madrid en las semifinales. Sin embargo, el equipo falló en primavera al perder dos finales de Copa consecutivas y no levantó cabeza hasta acabar la campaña.

El nuevo curso arrancó con ilusión, pero volvieron las dudas tras encadenar ocho partidos sin ganar. Por ello, el Athletic tendrá la oportunidad de dar una alegría a sus aficionados para que disfruten estas navidades. Hace apenas tres semanas estuvo a punto de doblegar a los blancos en el Bernabéu, pero la falta de puntería impidió sacar un resultado positivo (1-0). Después de voltear el marcador ante el Betis el domingo (3-2) y acabar con la racha negativa, el equipo sueña con cerrar el año de la mejor manera.

Marcelino admitía que el triunfo ha supuesto un «golpe anímico importante» porque ha demostrado al equipo que son capaces de ganar y remontar un partido ante un buen rival. El técnico asume que ante el Real Madrid van a tener que «sufrir» hasta el último segundo, pero confía en que se pueden llevar los puntos si mejoran en el acierto ofensivo. Asimismo, mencionaba que en San Mamés tienen que defender mejor y tratar de mantener la portería a cero.

El partido estará condicionado por el coronavirus. Unai Simón, Iñigo Martínez, Berenguer y Ezkieta son baja tras dar positivo en los últimos días. Asimismo, Vivian, Yuri, Villalibre y Nolaskoain continúan recuperándose de sus lesiones.

La presencia de Yeray también estaba en duda por un golpe, pero el técnico adelantaba que espera que esté disponible. Balenziaga sería la principal opción para cubrir su puesto ya que Aitor Paredes, central del Bilbao Athletic no ha debutado todavía. La retaguardia se confeccionará dependiendo de esta situación. Unai Núñez estará en el eje y en los laterales pueden jugar Lekue, De Marcos o Petxarroman.

En la portería estará el joven Julen Agirrezabala y en la convocatoria podían entrar Iru o Álex Padilla, ambos porteros de categorías inferiores que han entrenado con el primer equipo. Iru juega en el Bilbao Athletic y Padilla en el Basconia y es internacional con la selección española sub 19. Finalmente, Marcelino ha citado a Iru en la lista ofrecida este mediodía y también ha entrado Nico Serrano.

Con Iñaki Williams exultante tras marcar dos goles en la última jornada, Marcelino ha vuelto a defender que, más allá de los goles, el 9 rojiblanco le da mucho en ataque al equipo. La duda volverá a ser el nombre de su acompañante: Raúl García o Sancet. El más joven fue uno de los artífices principales de la remontada ante el Betis.

En el medio campo regresa Dani García después de cumplir la sanción. Zarraga también tendría posibilidades de entrar, aunque en el Bernabéu jugó escorado en banda derecha.

Marcelino también ha hecho referencia a la posibilidad de que Jon Morcillo salga cedido en el mercado de invierno. El de Zornotza apenas está contando con oportunidades y el técnico comentaba que no le puede prometer que jugará más en la segunda vuelta. Por ello, dejaba la decisión en sus manos. Al parecer, equipos de Segunda como Valladolid y Leganés han mostrado interés por su situación.

Un líder mermado por las bajas

El Real Madrid se presentará en San Mamés tras empatar a cero en la última jornada ante el Cádiz en casa. De la mano de Ancelotti, lidera la clasificación con solvencia y es el equipo que más goles ha marcado en lo que va de campeonato. Sin embargo, entre lesiones, sanciones y coronavirus el equipo llega muy mermado por las bajas. El técnico italiano no podrá contar con Modric, Marcelo, Rodrygo, Lunin, Asensio, Bale, Casemiro, Ceballos y Carvajal. El Real Madrid ha comunicado al anochecer que Isco y Alaba tampoco formarán parte de la convocatoria al dar positivo en las pruebas realizadas para detectar el coronavirus.

 

Ancelotti comentaba en la previa que espera un partido complicado ante el Athletic y que la plantilla deberá demostrar su calidad. Jugadores como Camawinga o Fede Valverde partirán de inicio junto a Benzema, Vinicius y Kroos. Hazard también podría tener una nueva oportunidad en el once.

En este sentido, Marcelino advertía de que Benzema y Vinicius se encuentran en un gran estado de forma y que deberán intentar de que tengan la menor participación posible.