Saint Andrews, la ciudad que vio nacer el campo más antiguo del mundo, ya está preparado para acoger desde este jueves y hasta el domingo el que muchos han denominado el mejor evento del golf del siglo: el 150º Open de Británico. Esta localidad escocesa es un lugar con un ambiente golfístico inusual donde todo alrededor del Old Course huele a golf. Los alrededores se nutren de universitarios durante el invierno y de golfistas durante el verano, y durante el The Open 2022 será muy normal, ver a los jugadores comiendo y tomando una pinta tras la ronda.

Eso sí, este Open será atípico y único. Generalmente este último major del año –el único de los cuatro que se celebra en Europa– se suele celebrar en los años terminados en cero o en cinco. Antes de que el Covid lo pospusiera todo un año, la Royal & Ancient decidió que el 150º Aniversario se jugaría en 2021 ya que esta esperada celebración caía en ese año, rompiendo la regla por primera vez en mucho tiempo. El resto ya es historia. El Open de Royal Saint Georges se trasladó a 2021 y con ello, el 150º Aniversario a 2022.

En esta tesitura, 14 millones de euros (misma cantidad de dólares) en premios, 2,5 para el ganador, repartirá este torneo que cuenta con la organización del Royal and Ancient Golf Club y que no ha invitado a los actos del 150 aniversario a Greg Norman, la cara visible del circuito LIV, la ‘superliga’ de golf que se se financia con dinero de Emiratos Árabes.

Con la amenaza de una disrupción en el golf mundial, regresa el Open Británico al campo en el que Tiger Woods ganó dos de sus Jarras de Clarete, en los años 2000 y 2005. Horas antes de dar sus primeros golpes en el campeonato, el golfista californiano cargó contra el LIV y los jugadores que han elegido esa propuesta, a los que acusó de «dar la espalda a lo que les ha permitido llegar» adonde están.

Woods entrará en acción tras su aparición en el PGA Championship y su ausencia en el Open de Estados Unidos.

Su compatriota Collin Morikawa, que ha bajado de la cuarta a la octava posición de la clasificación mundial, defenderá el título que logró como debutante el año pasado en el Royal St George’s Golf Club, en Kent. Iniciará la defensa con el norirlandés Rory McIlroy (ganó en 2014) y el estadounidense Xander Schauffele, flamante ganador del Open de Escocia, como compañeros de juego.

Dispuestos a que no repita triunfo están otros aspirantes a la victoria, como el número uno del mundo, el estadounidense Scottie Scheffler, ganador del Masters de Augusta, o el vizcaino Jon Rahm, tercero en la clasificación.

El de Barrika lo tiene claro. «Ser parte de esta edición y tener la oportunidad de ganarla, con todo lo que conlleva y lo grandioso que es este lugar, es muy singular. No creo que haya algo mejor que ganar en St. Andrews. Sin ofender a ningún otro torneo del mundo. Es el campeonato más antiguo, en el campo más antiguo y donde empezó todo», comentó Rahm, en rueda de prensa, dos días antes del comienzo del torneo.

El jugador vizcaino reconoce que «realmente no puedes llamarte gran jugador a menos que ganes ‘The Open’ en St. Andrews», y recuerda que es «muy selecto» el grupo que puede presumir de eso.

El Old Course, que tiene más de 6.600 metros (Par 72) y 112 bunkers, tiene el viento como uno de los principales factores a tener en cuenta. Aunque según ha señalado en la previa Martin Slumberg, director ejecutivo del Royal and Ancient Club de St. Andrews que organiza el Open Británico, no se prevé lluvia y no habrá tanto viento como les gustaría.

Esto no quiere decir que no haya «otras formas de poder configurar el campo de golf» para hacerlo «justo y desafiante» para los deportistas.

Al parecer, 290.000 serán los aficionados de todo el mundo que se den cita en el Open Británico, entre ellos 20.000 niños que asistirán de manera gratuita.

Sobre el viento, Rahm explicó que en St. Andrews este fenómeno puede «cambiar drásticamente» el campo y señaló que esa circunstancia determina «cuándo ser agresivo» y saber «arriesgarte en el momento adecuado». Por delante tendrán 72 hoyos en modalidad stroke play (juego por golpes), con un corte al que accederán, después de dos días de competición –jueves y viernes–, los 70 mejores jugadores y empatados. 

El ganador del Open de Estados Unidos de 2021 resaltó el interés de la localidad escocesa de Saint Andrews, aunque apenas ha podido disfrutar de la ciudad. «Hay demasiada gente. Cuando caminas con logos en tu camiseta, ya eres bastante reconocible. Desearía poder visitarla, hay un par de tiendas, librerías, libros de historia del golf, a las que me encantaría ir y posiblemente comprar algunos. Pero pasamos ayer (lunes) y había tanta gente… Ojalá pueda volver en algún momento y entrar y, al menos verlo, pero no creo que vaya esta semana», admitió.

Rahm comenzará este jueves el torneo a las 16.10, hora de Euskal Herria, junto con los estadounidenses Jordan Spieth y Harold Varner III