
El proyecto de ley para dar por primera vez ayuda militar directa a Taiwán ha superado hoy el primer y significativo escollo tras la luz verde del Comité de Exteriores del Senado.
El proyecto supone, según sus promotores, el mayor giro de la política estadunidense desde 1979, cuando Washington reconoció el principio de una sola China aunque se comprometió con la capacidad de autodefensa de la isla.
Supondría una ayuda militar directa por valor de 4.500 millones de dólares en los próximos cuatro años y obligaría al presidente estadounidense a imponer sanciones a las principales instituciones financieras chinas en respuesta «a toda escalada hostil contra Taiwán».
Avalada con 17 votos a favor y solo 5 en contra, la ‘Taiwan Policy Act of 2022’, que prevé además otorgar a la isla el estatus de «aliado mayor fuera de la OTAN», tiene aún un largo recorrido legislativo, ya que se trasladará al plenario del Senado, para luego ser dirigida a la Cámara de Representantes y, finalmente, promulgada por el presidente, Joe Biden.
De ser aprobada, aumentaría en miles de millones de dólares las ayudas que EEUU envía a Taiwán en materia de seguridad, entre otras cosas.
La oficina de la presidenta de Taiwán, Tsai Ing-wen, ha manifestado su «sincera gratitud» a Estados Unidos, que «una vez más demuestra su amistad bipartidista y su apoyo a Taiwán».
La reacción de China ha sido dura. La portavoz china de Exteriores, Mao Ning, ha denunciado «una mala señal» que apoya «a las fuerzas separatistas que hacen campaña por la independencia» de la isla.
«Si se sigue discutiendo, se sigue avanzando o finalmente se aprueba, este proyecto de ley sacudirá considerablemente los cimientos políticos de las relaciones chino-estadounidenses», así como la seguridad regional, ha advertido Mao Ning.
Prometió «contramedidas»
Justo la semana pasada, China condenó la venta de un paquete de ayuda militar estadounidense a Taiwán por valor de 1.100 millones de dólares anunciada el pasado viernes y prometió «contramedidas» para «defender su soberanía e intereses de seguridad».
La portavoz de Exteriores denunció entonces que Washington «viola descaradamente» los acuerdos con Pekín a cuenta de Taiwán con esta venta de armas, que «socava la paz y la estabilidad a lo largo del Estrecho».
EEUU alega que tiene también un compromiso con la isla para suministrarle ayuda militar, aunque sin dejar claro si intervendría en caso de ataque chino, una política bautizada como «ambigüedad estratégica».
Estados Unidos y China viven un momento de especial tensión acentuado por la reciente visita a Taiwán de la presidenta de la Cámara de Representantes estadounidense, Nancy Pelosi.
El viaje irritó profundamente al Gobierno chino, que respondió con sanciones económicas y con maniobras militares en las aguas que rodean a Taiwán.
China reclama la soberanía sobre la isla y considera a Taiwán una provincia rebelde desde que los nacionalistas del Kuomintang se replegaron allí en 1949, tras perder la guerra civil contra los comunistas.
Localizada la joven de 23 años desaparecida desde el día 25 en Donostia

El primer festival Aske pone la banda sonora a una Euskal Herria libre

La Ertzaintza deja impune la desaparición del test de drogas del hijo de un jefe policial

Mueren tres esquiadores, uno vasco, por un alud junto a los ibones de Brazato (Panticosa)

