Jason Remeseiro le ha sacado de un apuro al Alavés, que se ha quedado con uno menos tras la autoexpulsión de Benavídez en el minuto 36. El futbolista gallego se ha sacado de sus botas un tirazo –va para gol de la jornada y uno de los del torneo– en una falta bastante alejada.

Llegados ya a la treintena de puntos y con Mendizorrotza como terreno inexpugnable, el cuadro babazorro recupera así el liderato, pendiente de lo que haga el Burgos, que recibe al Tenerife.

Y aunque han sido los locales quienes más se han acercado por las inmediaciones de Cristian Álvarez, no ha sido hasta el minuto 20 cuando han dispuesto de una ocasión con visos de gol.

Una mala salida de balón del portero zaragocista, fuera del marco, la ha aprovechado Rioja para, después de un par de regates, poner la pelota en el área pequeña con la puerta totalmente desguarnecida, pero Jason solo ha podido peinarla, sin poder dirigirla entre los tres palos.

El encuentro se ha animado a partir de ahí. Un barullo dentro del área maña cinco minutos después lo ha tratado de resolver Benavídez con un tacón que llevaba marchamo de ser el 1-0, pero ha sacado bajo palos francés.

De posible goleador, el pivote uruguayo ha pasado a villano del partido. En una jugada sin apenas peligro, en una banda y campo del Zaragoza, se ha vuelto a extralimitar en una entrada –ya lo hizo frente al Racing, aunque solo vio la amarilla–, en este caso a Mollejo que, tras consulta del trencilla con el VAR, ha derivado en que haya tenido que coger el camino de vestuarios, con bronca añadida de su técnico, Luis García Plaza, por dejar al equipo en inferioridad.

El cuadro visitante se ha crecido al verse con uno más y el citado Mollejo ha empalmado de primeras una buena jugada trenzada por la izquierda del bloque aragonés, aunque Sivera, bien colocado, ha parado con autoridad.

El choque se ha ido enmarañando con varias amarillas más y, pese al dominio visitante, ha sido el Alavés quien ha tenido la más clara en el descuento del primer tiempo, pillando a su rival en una contra que ha acabado materializando Guridi, pero anulada posteriormente por fuera de juego claro de Rioja.

Jason, decisivo

Pese a que Giuliano ha metido el miedo en el cuerpo con un zurdazo pegado al poste al comienzo de la segunda parte (m.49), el Alavés no solo no se ha sentido agobiado por jugar con uno menos, sino que incluso se ha puesto por delante y ha protagonizado las mejores ocasiones.

Los babazorros han inaugurado el luminoso con un golazo de Jason en el 62. El coruñés, cuya calidad no se discute, ha ejecutado magistralmente una falta bastante lejana, colocando el esférico con un golpeo espectacular entre el poste izquierdo y la escuadra.

Y la segunda diana ha estado muy cerca en los minutos siguientes, los mejores del bloque arabarra. De nuevo Jason en el 66, con un frentazo, un tanto forzado, que se ha marchado por arriba y, más tarde, en el 72 con una diagonal de Rioja y posterior chut con la zurda que ha detenido Álvarez.

El Zaragoza ha puesto la réplica con un cabezazo de Lluis López (m.73), que ha superado en el salto a Miguel de la Fuente, pero que se ha marchado por encima del travesaño.

Los maños han apretado en el tramo final, con sendas galopadas por el flanco izquierdo de Giuliano, una de ellas rematada sin mucha fuerza por Puche, además de una tercera ocasión del primero, que ha acabado con un disparo que ha sacado con el cuerpo Duarte (m.87).

El sufrimiento se ha prolongado hasta el pitido final, pues instantes antes la ha tenido Gueye, en un balón suelto, pero su chut, un tanto mordido, le ha salido bastante centrado y lo ha detenido con determinación Sivera.

Finalmente, El Glorioso se ha hecho con una victoria de esas que elevan la moral del vestuario y que le sirve para recuperar la primera posición, a la espera de lo que haga el Burgos.