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Saski Baskonia se enfrenta al cansancio, a su relajación y a Basket Zaragoza, por ese orden

Los de Porfirio Fisac tienen dos victorias de margen respecto del descenso, en una andadura en la que solo han conseguido ganar en Sevilla y Manresa lejos de su cancha. Así las cosas, jugadores como Kurucs, Raieste o un Enoch cuestionado podrían tener mayor protagonismo.

Sander Raieste debiera tener cierto protagonismo ante Basket Zaragoza.
Sander Raieste debiera tener cierto protagonismo ante Basket Zaragoza. (E. CASAS | ACB PHOTO)

No es por hacer de menos a nadie, pero Saski Baskonia, después de haber jugado frente a Armani Milano y Panathinaikos a lo largo de la semana, cierra esta pequeña maratón enfrentándose este domingo a las 17.00 a Basket Zaragoza. O quizá haya que decir que se enfrentarán al cansancio y a su relajación en primer lugar y a Basket Zaragoza después.

Es verdad, no hay que olvidar que en los play-offs de la campaña 2018/19, los maños eliminaron por 0-2 a un Saski Baskonia entrenado por Velimir Perasovic, con el pívot cubano Javier Justiz –hoy retirado por culpa de las lesiones– y un imberbe Carlos Alocén –ya para entonces fichado por el Real Madrid, aunque cedido en la escuadra maña– ejerciendo, entre otros, de inesperados verdugos de los gasteiztarras. Pero puestos a no olvidar resultados, tampoco hay que olvidar que en la pasada campaña los maños caían por 91-59 en el Buesa Arena y en la primera vuelta, los de Joan Peñarroya precipitaban la caída del técnico austríaco Martin Schiller imponiéndose en tierras aragonesas por 83-97.

Después de aquel partido volvió Porfi Fisac al frente de la nave maña y, mal que bien, al menos por el momento lo ha sacado de la zona de descenso. La semana pasada superó en una prórroga agónica al Betis, equipo al que también le ganó a domicilio en la primera vuelta. Así las cosas, el cuadro maño suma dos victorias más que la zona de descenso y con la llegada de Ivan Cruz y todo un Stefan Jovic –el internacional serbio sabe lo que es rendir a buen nivel en la Euroliga, ya que ha militado en equipos con solera como Estrella Roja, Bayern, Khimki y Panathinaikos– han ganado en dirección de juego y poso, por no hablar de los pasos adelante que sigue dando el gigante Aday Mara, cuyo primer destewllo, en forma de ocho puntos seguidos, ya vivió el Baskonia en sus carnes.

En cualquier caso, no hace falta insistir en que Saski Baskonia es favorito claro para llevarse este duelo –es verdad que los de Fisac han ganado este mismo año al Real Madrid–, siempre y cuando se haga valer la larga rotación de la que suele hacer gala el preparador baskonista.

Por un lado, Kurucs apenas si tuvo algunos segundos en Milán y fue el descartado ante el PAO. Raieste fue es descarte del Mediolanum Forum y aunque se vistió de corto el viernes, no jugó. Es de suponer que estos dos debieran tener minutos este domingo, igual que un Daulton Hommes que el viernes se quedó sin jugar, ejercitándose con la bicicleta estática a lo largo del partido, al más puro estilo Andrea Bargnani. Cierto que el ala-pívot pareció resentirse de una de sus maltrechas rodillas en el duelo del martes, pero ante Basket Zaragoza, de no mediar algo más serio tendría que tener minutos.

Otro tanto se puede decir de Max Heidegger. Tras su trastabillado debut en Milán y las buenas maneras que mostró ante Panathinaikos, el base americano-israelí seguramente pueda darle buenos minutos de descanso a un Darius Thompson que ya ante el conjunto heleno se quedó con solo una canasta en juego, después de haber padecido la pegajosa defensa de uno de los gemelos Kalaitzakis. Asimismo, Heidegger seguramente sufra un poco menos en el apartado físico que el viernes, cuando se le vio muy agobiado a cuenta del ritmo del juego.

Steven Enoch es otro de los jugadores que peor están saliendo en la foto en las últimas jornadas. Su talento en ataque es indiscutible, pero su defensa colectiva deja mucho que desear, ya que pierde el sitio con una facilidad desesperante. Los Hlinason, Mara, Iván Cruz y compañía, si Enoch no está concentrado, pueden hacerle daño, pero por la misma regla de tres, si está a lo que tiene que estar, ese talento debe ayudarle a salir más que airoso del envite. Lo cierto es que es uno de los jugadores que más impacienta a la grada, justo cuando su peculiar manera de entender el basket exige mucha más paciencia.

En todo caso, solo Lenovo Tenerife se ha llevado la victoria en la Liga ACB del Buesa Arena y no parece que Basket Zaragoza vaya a ser el segundo en lograrlo. Salvo que se dé un exceso de cansancio y relajación, no debiera darse ese caso, desde luego.

Protesta de Panathinaikos

En otro orden de cosas, Panathinaikos ha decidido proceder a una protesta oficial ante la Euroliga por una jugada del partido del Buesa Arena del viernes, una jugada en la que una falta no pitada de Grigonis sobre Marinkovic terminó con un triple anulado a Dwayne Bacon, mientras que se le señalaba falta antideportiva al escolta lituano del PAO.

fue, sin duda, una de las secuencias más rocambolescas que se recuerdan en la Euroliga. A falta de seis minutos para el final, Dwayne Bacon encestó un triple para poner el 83-75, pero la canasta no subió al marcador. Los árbitros cambiaron su decisión despuñes de haberla dado como válida en un primero momento. Y es que el señor colegiado Matej Boltauzer, árbitros principal del trío que pitó el duelo de Zurbano, decidió por su cuenta recurrir al Instant Replay sobre la acción de Grogonis sobre Marinkovic, una falta clara que pasó de no tener castigo a ser considerada falta antideportiva, anulando por ende la canasta de Bacon.

El club griego ha resuelto protestar de forma oficial ante la Euroliga por esta situación en concreto, insistiendo en que no hubo señalización de falta antes del tiro de Bacon, por lo que los árbitros no podían ignorar la canasta realizada y retroceder el reloj a la jugada anterior.

El marcador pasó a ser un 85-72 tras dos tiros libres de Vanja Marinkovic y el Baskonia consiguió una ventaja de 13 puntos, en lugar de que el Panathinaikos recortara la diferencia a ocho puntos. Hay que recordar que el duelo acabó con 95-90 para los gasteiztarras.