Hace treinta años, un chaval gasteiztarra al que se le daba bien darle patadas a un balón, algo que llamó la atención en los técnicos de base del Athletic, lograba el sueño de su infancia: debutar con la elástica rojiblanca del primer equipo.

Aquel 15 de septiembre de 1993 el entonces técnico del club vizcaino, Jupp Heynckes, le daba la alternativa a Aitor Karanka, además como titular, en un vuelta copera frente a Las Palmas.

Debió gustarle tanto el rendimiento del central que en esa misma temporada volvió a utilizarle en otros 18 encuentros ligueros más, en casi de todos ellos formando parte del equipo inicial.

Y, a partir de ahí, su concurso en el eje de la zaga rojiblanca se convirtió en indispensable. Su participación en las tres siguientes campañas nunca bajó de la treintena de partidos disputados.

El Real Madrid puso sus ojos en aquel elegante y rápido defensa para abonar la nada despreciable cifra de 1.000 millones de pesetas de su cláusula de rescisión para hacerse con sus servicios e iniciar así una fase en la que lograría tres Champions, dos Supercopas y una Intercontinental.

Finalizado ese tránsito por el club merengue, Karanka regresó al Athletic, donde permaneció cuatro ejercicios más, aunque los dos últimos de manera un tanto testimonial, lo que le llevó a probar la aventura norteamericana, colgando las botas en el Colorado Rapids.

Durante todo ese tiempo, fue citado hasta en seis oportunidades por la selección de Euskal Herria y solamente una por el combinado español, un partido al que le guarda especial cariño tal y como se puede apreciar en su colección de camisetas con la que ha posado para celebrar los 30 años de su debut.

«Hoy celebro una aniversario muy especial: 30 años desde mi debut en el fútbol profesional. Un viaje único defendiendo los colores de algunos grandes clubes. Mis días como jugador juegan un papel importante en todo lo que hago ahora como entrenador», ha explicado en inglés.

I’m celebrating a very special anniversary today: 3️⃣0️⃣ years since my debut in professional football.

A unique journey defending the colours of some great clubs. My playing days play a big part in everything I now do as a coach. pic.twitter.com/lfsra7Abv5

— Aitor Karanka (@Karanka) September 15, 2023

Más de 200 partidos con el Athletic, casi un centenar con el Real Madrid, una treintena con el Colorado Rapids en su última temporada como profesional, seis partidos defendiendo los colores de la selección de Euskal Herria desde 1994 hasta 2004 –convirtiéndose en un habitual en las convocatorias del combinado vasco en su tradicional partido anual en reivindicación de la oficialidad– y tan solo un partido con la española, en 1995.

Una vez retirado del césped, el gasteiztarra decidió darle continuidad a su pasión por el fútbol desde los banquillos, si bien sus inicios como entrenador fueron un tanto convulsos, ejerciendo como segundo del polémico Jose Mourincho en su etapa al frente del Real Madrid, con algunos episodios que no le dejaron a Karanka precisamente en un buen lugar.

Posteriormente, inició una prolongada andadura en el fútbol inglés, tomando primero las riendas de un Middlesbrough al que acabó ascendiendo a la Premier, posteriormente se hizo cargo del Nottingham Forest donde solo duró un año y, más tarde, entrenó al Birgimgham City, conjunto en el que todavía permaneció menos tiempo.

En abril de 2022 arribó en un casi desahuciado Granada y, aunque no pudo evitar el descenso a Segunda, sus buenos resultados le permitieron gozar de continuidad en el club andaluz. Ya en Segunda la campaña pasada apenas permaneció 15 partidos.

A principios del presente año firmó con el Maccabi Tel Aviv para los dos próximos cursos, pero el pasado 25 de junio, de mutuo acuerdo con la entidad israelí, quedó rescindido.