
En 1858, en el barrio judío de Bolonia, los soldados del Papa irrumpen en la casa de la familia Mortara. Siguiendo órdenes del cardenal, han ido a coger a Edgardo, el hijo de siete años.
El niño fue bautizado en secreto por su nodriza cuando era bebé y la ley pontifical es indiscutible: tiene que recibir una educación católica.
Los padres de Edgardo, conmocionados, van a hacer todo lo posible por recuperar a su hijo. Apoyados por la opinión pública de la Italia liberal y la comunidad judía internacional, la lucha de los Mortara no tardará en cobrar una dimensión política. Pero la Iglesia y el Papa se niegan a devolver al niño, tratando así de consolidar un poder cada vez más debilitado.
´Te rapto porque Dios lo ha querido así»
Esta es la base sobre la que se asienta la nueva película de Marco Bellocchio, un cineasta que, en repetidas ocasiones, ha mostrado de manera clara y contundente, su disconformidad con la Iglesia católica.
Según dijo el director italiano, «la historia del rapto de este niño judío, Edgardo Mortara, me interesa especialmente porque me permite, por encima de todo, plasmar en la pantalla un crimen cometido en nombre de un principio absoluto: ‘Te rapto porque Dios lo ha querido así, y no te puedo devolver a tu familia. Estás bautizado, y por ese simple hecho eres católico para la eternidad’. Es el non possumus (no podemos) del Papa Pío IX. Por tanto, sería correcto, para garantizar su salvación en el más allá, doblegar la vida de un individuo, en este caso un niño que, por su corta edad, no tiene la fuerza para resistir ni para rebelarse».

Diez bandas navarras rinden homenaje al trovador Fermin Balentzia con un disco tributo

La autopsia confirma el crimen machista en Barakaldo; detenido un hombre de 27 años

Multa de 400 euros por protestar en la inauguración del Culinary Center de Gros

El equipo de gobierno de Iruñea pide la dimisión de Ibarrola y Adanero por «difundir bulos»

