El Alavés ha sumado un punto más en su objetivo de lograr una permanencia sin apuros, que han podido ser tres si hubiera mantenido la ventaja que ha logrado con una diana de Benavídez a falta de un cuarto de hora.

Sin embargo, Nastasic –el mejor de los mallorquines– ha igualado el encuentro al filo de cumplirse el tiempo reglamentario, premio que se ha merecido el cuadro balear, quien ha dispuesto de oportunidades claras, especialmente en el primer tiempo.

El comienzo del choque no ha podido ser más atractivo para el espectador. Ambos contendientes se han olvidado del tanteo inicial, afanándose en llegar cuanto antes la meta contraria, con llegadas al área rival tanto de locales como visitantes.

Pero ese equilibrio vistoso y ofensivo no ha durado mucho. El dominio se ha inclinado claramente del lado bermellón, que se ha hecho dueño y señor del encuentro durante la primera media hora del partido, sin acusar las rotaciones en el once.

Y ha generado ocasiones de sobra como para ponerse por delante en el marcador ante un Alavés un tanto grogui e incapaz de contener las acometidas isleñas y de frenar una dinámica que ha podido pagarla muy cara.

De hecho, ha sido Sivera quien ha contenido el arreón mallorquín, manteniendo su portería a cero con algunas intervenciones de mucho mérito. La más importante, en el minuto 21, cuando ha sacado los guantes para rozar un intento de picadita de Radonjic que ha acabado golpeando la base del travesaño.

También ha estado atento el guardameta alicantino para taponar el primer palo en una colada de Morlanes –el mejor de los isleños– en el minuto 27. Lo mismo que Gorosabel al sacar de cabeza un envío envenenado de Nacho Vidal, aunque finalmente ha cometido falta Muriqi en el salto.

Poco bagaje en ataque para los anfitriones, quienes han centrado sus escasos acercamientos combinando por la izquierda con Rioja, aunque sus centros y los de Javi López no han encontrado rematador, ante el buen hacer y anticipación de Nastasic y Valjent.

Apenas ha podido conectar Samu un testarazo desviado (m.18), amén de un chut muy elevado de Abqar (m.34) con el que terminar una jugada ofensiva a balón parado para los dirigidos por un Luis García Plaza nada contento desde la banda.

Ha faltado amarrar los tres puntos

Ha despertado el Alavés tras el paso por vestuarios. Adelantando líneas, ha llevado la iniciativa y metido a su adversario en propio campo, aunque sin afilar el colmillo a la hora de encarar la portería de Rajkovic.

Tanto Álex Sola como Samu han estado bastante desaparecidos. El donostiarra, más apagado de lo que acostumbra, solo ha sido protagonista en el lanzamiento de una falta lateral (m.55), eso sí, que ha pasado a escasos centímetros del palo.

Ante la falta de novedades en el luminoso, se han sucedido sendos movimientos en los banquillos, aunque con cambios naturales que en un principio no han agitado el envite, que ha entrado en una fase más igualada.

Y mucho centrocampismo, acompañado de escasa fluidez y demasiados errores, aunque ahora aportando más Vicente por el costado derecho, poniendo centros con bastante sentido, abortados por el buen juego aéreo de Rajkovic.

Hasta que, a falta de un cuarto de hora, el balón parado se ha mostrado como un arma poderosa del Alavés. De un corner, el recién entrado Benavídez ha anotado con un cabezazo picado al palo su primer gol liguero del curso.

Con el 1-0, los babazorros han cedido más metros de los convenientes, lo que, sumado a los cambios ofensivos que ha realizado el preparador del cuadro mallorquín, Javier Aguirre, ha derivado en un envite inclinado hacia el área de Sivera.

La dupla Larin-Muriqi ha sido demasiado poderosa para una zaga albiazul que no ha podido contener el ímpetu de ambas torres, quienes se han hecho con la superioridad aérea en el empate que ha materializado Nastasic en el 88, poniendo la rúbrica a un gran encuentro del central serbio.

El empate además ha traído consigo la expulsión por doble amarilla de Luis García Plaza, debido a sus protestas y, aunque ha quedado tiempo para la reacción, lo cierto es que la igualada ha sentado mejor al Mallorca, que ha apretado a la búsqueda de su segunda victoria liguera foránea del ejercicio.

Lo ha conseguido provisionalmente Larin en el tiempo de descuento, pero el árbitro ha detectado una mano intencionada del ariete canadiense para acomodarse el cuero antes de rematar.

Al final, reparto de puntos en Mendizorrotza, que hace justicia a lo que se ha visto sobre el verde, con fases de dominio alterno, poca presencia ofensiva y mayor protagonismo de los centrales a la postre.

FICHA DEL PARTIDO:

Alavés: Sivera, Gorosabel (Tenaglia, m.85), Abqar, Rafa Marín, Javi López, Guevara, Blanco (Benavídez, m.71), Guridi, Álex Sola (Carlos Vicente, m.59), Rioja (Duarte, m.85) y Samu (Kike García, m.71).

Mallorca: Rajkovic, Nacho Vidal (Giovanni, m.59), Valjent, Nastasic, Copete (Llabrés, m.84), Lato, Mascarell (Dani Rodríguez, m.84), Morlanes, Darder (Samu Costa, m.91), Radonjic (Larin, m.59) y Muriqi.

Goles: 1-0, m.76: Benavídez.

Árbitro: García Verdura (comité catalán). Ha expulsado por doble amarilla a Luis García plaza y ha amonestado a Nacho Vidal (m.54).

Incidencias: 16.102 espectadores en las gradas de Mendizorrotza.