El Gobierno de Lakua y EH Bildu se resisten a cerrar la puerta a un acuerdo presupuestario, aunque ambas partes reconocen que se trata de una cuestión compleja. En este contexto, ayer celebraron una reunión tras la que el proceso de negociación continúa vivo. La votación del proyecto presupuestario está prevista para el 20 de diciembre.

En el encuentro de ayer hubo un nuevo intercambio de puntos de vista en torno a las cuentas de Lakua para 2025 sin que, por el momento, se haya cerrado un acuerdo, por lo que proseguirán las negociaciones, según informó Europa Press citando fuentes del Departamento de Hacienda y Finanzas de Lakua.

EH Bildu es el único interlocutor de Lakua, ya que PP y Sumar se han descolgado del proceso y presentarán enmiendas a la totalidad. En cualquier caso, PNV y PSE tienen el suficiente respaldo del Parlamento de Gasteiz para aprobar el presupuesto. Lo que está en juego es que las cuentas sean aprobadas con un apoyo amplio, para lo que es necesario el acuerdo con EH Bildu, o con el único respaldo de los dos socios de gobierno.

Nuevas ofertas

El Departamento de Hacienda y Finanzas del Gobierno de Lakua planteó en el encuentro de ayer una nueva oferta a EH Bildu, aunque no transcendieron los detalles de la misma, ya que en este fase de la negociación ambas partes optaron por priorizar por la discreción.

En declaraciones realizadas a las puertas del Parlamento de Gasteiz a los medios ayer antes de que se celebrase la reunión, el portavoz de EH Bildu en la Cámara autonómica, Pello Otxandiano, señalaba que las posiciones seguían «alejadas», pero destacaba que todavía había tiempo para intentar llegar a un acuerdo mientras la tramitación parlamentaria no haya concluido definitivamente. Junto a ello, señalaba que EH Bildu también iba a plantear una nueva oferta a Lakua.

Otxandiano mostró el enfado de EH Bildu ante la descalificación de sus propuestas por parte de Lakua, señalando que la reunión de ayer venía precedida por «afirmaciones muy sesgadas» sobre la viabilidad de las propuestas de la formación abertzale, que se han centrado en medidas para hacer frente a la crisis habitacional y la aplicación de mecanismos para implementar un sueldo mínimo acorde con la realidad socioeconómica vasca superando la falta de competencias autonómicas mediante la facilitación de un acuerdo interprofesional. Ninguna de estas dos propuestas ha sido vista con buenos ojos por Lakua.

Con el objetivo de alcanzar un acuerdo presupuestario, EH Bildu ha apartado de la negociación la fiscalidad, un ámbito en el que mantiene discrepancias con los partidos que sostienen al Gobierno de Lakua.

«EH Bildu se ha movido»

Otxandiano destacó ayer, en este sentido, que EH Bildu «se ha movido mucho» de sus posiciones iniciales para intentar acercarse al Gobierno de Lakua, una actitud que, incluso, ha sido reconocida por el consejero de Hacienda, Noël d’Anjou. Por tanto, desde EH Bildu se considera que ahora corresponde a Lakua hacer un esfuerzo para acercar posturas si existe realmente una voluntad para alcanzar un acuerdo presupuestario con un amplio respaldo parlamentario. Lo manifestó ayer Otxandiano a las puertas del Parlamento de Gasteiz y lo hizo el martes Nerea Kortajarena ante los micrófonos de NAIZ Irratia.

«El Gobierno debe aclarar si realmente quiere llegar a un acuerdo con EH Bildu y si está dispuesto a moverse para ello», señalaba ayer Otxandiano.

«Sabemos perfectamente que el Gobierno tiene mayoría absoluta, no paran de decirlo; pero debe hacer una reflexión», añadió el portavoz parlamentario de EH Bildu.

Otxandiano reconocía ayer que las posiciones de EH Bildu y las del Gobierno de Lakua estaban alejadas en materias como vivienda, pero insistía en que todavía hay tiempo. «Muchas veces, los acuerdos importantes y complicados se proceden en el último momento», añadió.

En el ámbito de la vivienda, Otxandiano destacó que el incremento de las personas registrads en Etxebide como demandantes de vivienda protegida en alquiler evidencia que cada vez más gente no puede pagar un alquiler en el mercado privado, una prueba, a su juicio, de que «las políticas de vivienda desarrolladas hasta ahora no funcionan y que existe una emergencia habitacional».

En relación al salario mínimo, Otxandiano reconoció que la CAV carece de competencias en ese ámbito, «ya que se carece de soberanía», por lo que abogó por obtener la capacidad de decisión sobre esta cuestión en el nuevo estatus político.

Así, defendió que es posible fijar un salario mínimo propio en la CAB mediante un acuerdo interprofesional y señaló que es un objetivo que podrían lograrse en 2025 mediante un acuerdo político «que se debe alcanzar más pronto que tarde».

«EH Bildu sigue abierta a proseguir con la negociación presupuestaria mediante la presentación de propuestas que son concretas y realistas y que cuentan con referencias en el entorno más cercano», añadió Otxandiano.

En este sentido, cabe recordar que en diciembre de 2021 el consejero de Hacienda, Pedro Azpiazu, y la portavoz de EH Bildu en el Parlamento de Gasteiz, Maddalen Iriarte, suscribieron un acuerdo para fomentar la implementación de un salario mínimo interprofesional propio mediante convenios colectivos, superando así la ausencia de competencias. EH Bildu se ha quejado de que este acuerdo no se ha desarrollado.

«No nos resignamos, hay alternativas», concluyó Otxandiano su intervención de ayer a la mañana.