Imanol  Intziarte
Redactor de actualidad, con experiencia en información deportiva y especializado en rugby

La Real se queda sin su sexta victoria seguida tras un choque con ocasiones pero sin goles

Real Sociedad y Las Palmas han empatadosin goles en un partido intenso, en ocasiones bronco, y en el que ambas escuadras han tenido oportunidades claras para marcar pero no han acertado (0-0). Los donostiarras pierden la ocasión de auparse al quinto puesto. 

Sergio Gómez lamenta una oportunidad desaprovechada.
Sergio Gómez lamenta una oportunidad desaprovechada. (Jon URBE | FOKU)

Querían la sexta, pero no ha sido posible. No se puede decir que la Real no se haya desfondado en busca de los tres puntos, pero se ha topado con un Las Palmas también enrachado que se ha defendido con firmeza y ha salido con peligro cuando ha podido. De hecho, los canarios han tenido tres oportunidades clarísimas, pero entre Remiro y los palos se ha vuelto a mantener la portería impoluta. Cuando no puedes ganar, al menos conserva el punto.

Imanol ha cambiado cuatro elementos respecto al once que pasó por encima del Dinamo de Kiev el pasado jueves. Javi López ha entrado por Aihen en el lateral izquierdo, Zubimendi y Sucic han regresado por Urko y Olasagasti, y Sergio Gómez volvía a la titularidad en detrimento de Becker. El resto, siete básicos como Remiro, Aramburu, Zubeldia, Aguerd, Brais, Kubo y Oyarzabal.

Enfrente, un adversario con viejos conocidos como Sandro –titular y que llegaba de hacer un doblete ante el Valladolid– o un Januzaj, suplente, que desde que se fue de Donostia no levanta cabeza. Nutrida presencia de afición ‘pío pío’y excelente sintonía, con ambas mascotas saludando juntas a la grada en los prolegómenos.

Antes de iniciarse el partido, Anoeta entero y en pie ha guardado un atronador minuto de silencio por Koldo Anza, trabajador de la Real durante varias décadas y que ha fallecido esta semana.

Los locales han comenzando intentándolo de lejos, con sendos disparos de Sucic y Zubimendi que se han escapado por poco. Las Palmas ha podido adelantarse en una mala cesión de Zubimendi en la que Remiro ha dudado en salir pero luego ha resuelto la papeleta en el mano a mano ante Mata. El de Cascante ha vuelto a estar brillante en un contrataque perfecto que Moleiro no ha podido culminar. Segundo aviso.

Oyarzabal, a la cruceta

La reacción no se ha hecho esperar y Oyarzabal ha podido marcar con toda la portería para él, pero ha ajustado tanto su disparo que lo ha repelido la escuadra. La recta final de la primera mitad se ha caldeado, con un fútbol más bronco, algunas entradas feas y especial protagonismo en este capítulo para el portugués Essugo. A partir de ahí, el arbitraje de Munuera Montero ha desquiciado a tirios y troyanos.

En la reanudación Las Palmas ha tenido su tercera oportunidad diáfana. Sandro casi cumple ‘la maldición del ex’ en una jugada clavada a la de Oyarzabal, con el cuero repelido por la madera. La Real no encontraba la llave hacia la meta de Cillessen y en el 65 Imanol metía piernas más frescas con Barrenetxea y Olasagasti por Kubo y Brais.

Barrene ha estado cerca de repetir lo de los últimos partidos, salir y besar el santo, pero su primer disparo ha salido muy centrado y el segundo lo ha mandado a córner el meta neerlandés. Tampoco Sergio Gómez ha acertado en el 75, con los locales ya volcados y el partido convertido en un carrusel de ida y vuelta. Con más tensión que juego, los minutos iban cayendo. Oskarsson ha tenido la última, pero el marcador no se ha movido.