Adelantada la noticia en la jornada de lunes, Surne Bilbao Basket ha confirmado este martes el corte del escolta dominicano Omar Silverio, llegado hace un mes a la disciplina bilbaina. En su contrato existía una cláusula de corte que, de aplicarse, debía hacerse en este parón por las «Ventanas FIBA» y es por ello por lo que Omar Silverio ya es historia, en uno de los fichajes más claramente fallidos por parte de Rafa Pueyo desde que ejerce de director deportivo del club bilbaino.

Sabido es que todo el proceso de la llegada del escolta caribeño ha sido un desatino, sobre todo porque para cuando llegó, un mes más tarde de lo esperado, los lesionados Kristian Kullamae y Xavi Rabaseda enfilaban ya la recta final de sus ausencias por lesión. Ello ha supuesto que la contribución del jugador nacido en el Bronx haya sido mucho más escasa de lo que nadie esperaba, por más que nadie pueda achacarle falta de voluntad al jugador de subirse al ritmo competitivo de la Liga ACB y la FIBA Europe Cup.

El jugador caribeño ha participado en tres partidos de la Liga ACB y tres de la FIBA Europe Cup sin mucha relevancia. En la ACB ha promediado 1,7 puntos y -2,7 de valoración en menos de 8 minutos de juego y en Europa estos números han mejorado hasta los 7,7 puntos y 5 de valoración en 20 minutos por encuentro.

Aguas turbulentas

Por ende, y con la plantilla al completo, Surne Bilbao Basket ha decidido dar carpetazo a la etapa de Omar Silverio, aunque no por ello deja de mirar algún otro exterior. La irregularidad en el acierto exterior es uno de los grandes debes del conjunto que dirige Jaume Ponsarnau y la temperada bilbaina está en medio de aguas clasificatorias turbulentas.

Por un lado, con siete triunfos en su haber, los hombres de negro ocupan la decimotercera plaza, pero con solo una victoria más que Bàsquet Girona, penúltimo clasificado, un cuadro catalán que empata con Granada y Lleida. Por el otro, la aventura europea se ha complicado en las últimas semanas y la eliminatoria de cuartos frente al Tofas Bursa se va a llevar a cabo jugándose el partido de vuelta en tierras otomanas.

Si Rafa Pueyo y su equipo de trabajo quiere de verdad buscar un fichaje, tiene dos semanas limpias de polvo y paja. Por un lado, la Copa tendrá lugar en Gran Canaria a partir del jueves, mientras que la semana que viene toca el parón por las «Ventanas FIBA», con la habitual sangría de jugadores que, en este caso, quizá sea menor entre los hombres de negro, al optar también las selecciones a los jugadores de equipos que participan en la Euroliga.

Ello supone que el próximo partido de Surne Bilbao Basket no llegue hasta el domingo 2 de marzo, un partido más que importante para el futuro de los de Jaume Ponsarnau, ya que se enfrentan a Bàsquet Girona, rival directísimo por la permanencia como ya queda dicho, contra quien los bilbainos padecieron una de sus derrotas más dolorosas en la primera vuelta, al caer por 100-94 en la prórroga, después de haber dominado con ventajas por encima de los diez puntos. El duelo de ida de cuartos de final de la FIBA Europe Cup, en cambio, no se disputará hasta el 5 de marzo.