Salhaketa Nafarroa ha revelado este martes en el Parlamento que presos de la macrocárcel de Iruñea relatan haber sufrido contenciones mecánicas –uso de grilletes...–, malos tratos y tratos humillantes. Lo ha desvelado dentro de la presentación de su última investigación sobre las condiciones de vida en esta prisión.

UPN ha advertido a la asociación en defensa de los presos y expresos sobre la gravedad de las acusaciones y les ha criticado por airear hechos careciendo de pruebas. «Hay que tener cuidado», les ha dicho.

Libertad Francés, portavoz de Salhaketa, se ha mantenido firme y ha señalado que los relatos recabados revisten de «especial valor» por el contexto en el que se obtuvieron. 

Ha subrayado que el criterio de las organizaciones internacionales de prevención de la tortura es dar mayor verosimilitud a estos testimonios, dado que una prisión es un lugar particularmente opaco donde es difícil obtener pruebas. Además, ha recordado que en un contexto así presentar una denuncia puede conllevar perjuicios para la víctima.

NAIZ ha contactado con Salhaketa una vez terminada la comparecencia. «Lo que nos han relatado no entra en la definición oficial de tortura en tanto que no es un maltrato por parte de un funcionario para obtener información, pero sí encaja en la definición de tortura que manejamos las entidades sociales», ha precisado Francés.

El contenido completo del informe se conocerá públicamente las próximas semanas. 

Mejora en salud mental, problemas en atención básica

Las denuncias de estas prácticas fueron tan solo uno de los puntos del análisis efectuado por la asociación y que se sostiene con 27 entrevistas a presos, expresos, familiares y funcionarios, junto al análisis de 82 quejas entre mayo y diciembre del pasado año.

Francés ha remarcado que los testimonios de maltrato les han podido llegar por cualquiera de estas vías y que los relatos pueden ser «en primera o en tercera persona».

Además, Salhaketa ha usado como fuente de su informe distintas reclamaciones de información que realizó tanto al Gobierno de Nafarroa, que ha asumido la competencia de la sanidad del centro, como a Instituciones Penitenciarias.

Salhaketa describe en su estudio una cárcel donde la cantidad de población reclusa no para de crecer. De los 125 presos que había en la cárcel derribada en 2012 se ha pasado a 412 a finales del año pasado en la nueva ­–y al parecer ha seguido creciendo hasta los 480 en los últimos meses–.

La inmensa mayoría, el 94,4%, son varones, quedando reducida la presencia de mujeres a un módulo de respeto. La asociación ha reiterado su reivindicación de que los módulos de respeto son voluntarios y que las mujeres reclusas de Iruñea tienen que elegir entre aceptar un módulo con esas condiciones o ser trasladadas a otro penal.

Por otro lado, aun reconociendo que existe una correlación aparente entre la población presa de Nafarroa y la de la CAV, Salhaketa considera que no existe interrelación, sino que el aumento progresivo del número de personas presas en Iruñea se ha dado desde que se construyó la macrocárcel, cuya infraestructura sigue a medio llenar (solo 6 de 13 módulos están en funcionamiento), produciéndose la paradoja de situaciones de «hacinamiento» en módulos en uso con grandes espacios vacíos.

Por otro lado, la asociación ha animado a los partidos a seguir reivindicando la competencia para Nafarroa en materia de prisiones, pues entiende que será positivo para el respeto de los derechos humanos de los internos.

La asociación es favorable a que Nafarroa asuma la competencia de prisiones, pues entiende que será positivo para el respeto de los derechos humanos de los internos.

En este sentido, ha remarcado que la asunción de la Sanidad Penitenciaria ha supuesto importantes avances en lo relativo al cuidado de la salud mental de las personas presas.

En este punto, ha surgido cierta controversia tras la denuncia pública del Defensor del Pueblo de hace dos semanas indicando que no se estaban cubriendo las necesidades mínimas de los presos, que solo hay un médico y que debería haber cuatro.

Salhaketa, aun compartiendo esta preocupación, ha referido que la situación no es inédita en la cárcel y ha señalado que la ventaja de la asunción de las competencias sanitarias es que ellos pueden denunciar y el Parlamento hacer algo para revertir la situación.

Todas las formaciones se han manifestado a favor de la asunción plena de la competencia de prisiones, como tiene Lakua, a excepción de UPN. No estaban representantes de Vox ni del PP.

La portavoz de la formación, Marta Álvarez, ha asegurado que para lo único que ha servido el traspaso de competencias a la CAV ha sido para que «los etarras accedan al tercer grado antes de tiempo».