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El pivote Iñaki Peciña retorna a Bidasoa-Irun 15 años después de su marcha

El irundarra de 37 años ha firmado por dos temporadas, dando solidez defensiva y experiencia al equipo. Peciña procede del Chanvery Savoie Handball francés de la liga gala, competición en la que ha militado los ocho últimos años. Se espera que una vez se retire forme parte del organigrama deportivo.

Iñaki Peciña posa con la camiseta de su segunda etapa en Bidasoa-Irun.
Iñaki Peciña posa con la camiseta de su segunda etapa en Bidasoa-Irun. (@CDBidasoaIrun)

Irudek Bidasoa-Irun ha reforzado su plantilla para las dos próximas temporadas con el regreso del pivote internacional Iñaki Peciña (37 años y 2,00 metros) que ha militado los últimos ocho años en la liga francesa y 15 años después de que el irundarra saliera del club de la bahía de Txingudi.

Peciña procede del Chanvery Savoie Handball de la máxima categoría gala, aunque conoce bien su nuevo equipo porque se formó en las categorías inferiores del Bidasoa-Irun y militó tres años en el primer equipo (2007-10).

El jugador irundarra tiene un buen palmarés internacional, ya que con la selección española consiguió una plata en el Europeo de Hungría y Eslovaquia 2022 y un bronce en el Mundial de Suecia y Polonia 2023.

El presidente de la entidad, Gurutz Aginagalde, ha declarado este viernes que la llegada de Peciña «no es una incorporación más, ya que cuenta con una sólida trayectoria internacional, curtido en una de las ligas más exigentes del mundo como es la francesa y supone un salto de calidad para la plantilla, a la que aportará experiencia, carácter y rendimiento inmediato sobre la pista».

El nuevo jugador del Irudek Bidasoa-Irun, por su parte, ha declarado que «a nivel deportivo no es ningún esfuerzo venir aquí» porque constituye una oportunidad de volver a sentirse jugador, valorado y respetado, de sentirse importante y de competir por cosas, por lo que considera que «ha sido una decisión bastante sencilla».

«Queremos agradecerle de corazón el esfuerzo que ha hecho para volver, sabiendo que tenía propuestas muy importantes encima de la mesa. Su compromiso con el Bidasoa, con nuestra historia y con esta afición es incuestionable. Supone un refuerzo de alto nivel a nivel deportivo», ha insistido en ese sentido el presidente Gurutz Aginagalde.

Y es que la intención última del club irundarra es que en el momento en el que Peciña deje la práctica activa del balonmano se integre en el organigrama deportivo, tal y como hizo en su día el director deportivo Julen Aginagalde, ahora máximo responsable de esa faceta en la entidad bidasotarra y recientemente nombrado entrenador ayudante de la selección masculina absoluta de Polonia.