
SASKI BAASKONIA 103 (0) - REAL MADRID 112 (2)
Se acabó lo que se daba. Saski Baskonia lo ha intentado y ha tenido al Real Madrid contra las cuerdas, sobre todo en la primera mitad, en los mejores minutos de Luka Samanic que con su capacidad de salir de la zona y con un Trent Forrest que ha sumado 30 puntos ante un día atolondrado de Markus Howard, muy bien defendido por Hugo González y Alberto Abalde.
Lo han intentado todo los de Pablo Laso, convirtiendo el duelo de Zurbano en un tiroteo al más puro estilo OK Corral, pero el Real Madrid ha sabido aceptar el reto y después de sobrevivir al 12 de 16 que Saski Baskonia ha firmado en triples en la primera mitad –para terminar con un 17 de 34; es decir, 5 de 18 tras el descanso– y pese a sus siete tiros libres errados –por ocho del Baskonia–, ha sabido superar a los gasteiztarras con Andrés Feliz erigido en un arma ya no tan secreta para Chus Mateo, más los puntos de los sempiternos Llull, Campazzo y un Tavares que solo ha aparecido cuando a Samanic se le ha agotado el fuelle.
Tendrá que hacer reflexión Saski Baskonia, porque la buena imagen de este viernes, toda esta combatividad, ni de lejos se ha visto en demasiados partidos. Ahora es tarde para lamentarse. Toca irse de vacaciones y después del descanso, preparar la termporada 2025/26 aún más complicada al haber hasta 20 equipos en la Euroliuga, uno de ellos en Dubai.
Duelo en OK Corral
El ambiente ha sido de gala, con una excitación comprensible por lo apurado de la situación, aunque ya es de sobra conocido que no hay presión ambiental que valga a menos que el juego respalde lo que propone el ambiente.
Ha sorprendido Pablo Laso incluyendo a Rogkavopoulos y Samanic en el quinteto titular en detrimento de Khalifa Diop y Luwawu-Cabarrot, mientras que Chus Mateo ha sacado a Ndiaye de ese cinco inicial en lugar de Llull, dejando a Hezonja haciendo las veces de ala-pívot, lo que en rigor ha significado liberar la zona por completo para Tavares.
Nada ha tenido que ver el acierto del arranque de este partido con lo que se vio el martes. Aunque Markus Howard seguía inédito durante más de cinco minutos, Saski Baskonia había anotado ya cinco triples de siete intentos. Y menos mal, porque en esos cinco primeros minutos el Real Madrid ha anotado 20 puntos, manteniendo siempre la delantera.
Por fortuna, las absurdas dos primeras faltas de Hezonja han trastocado la rotación madridista, mientras que la capacidad de abrir la cancha de Luka Samanic ha superado el factor Tavares. Hasta tres triples ha anotado el croata en este primer cuarto, por otros tres de Trent Forrest, mucho más protagonista después de su desaparición del ataque del partido del martes. Saski Baskonia ha pasado de caer por 16-20 a irse 30-23, con la única mala noticia de las dos personales de Howard.
Hasta nueve bombazos de tres puntos han clavado los de Pablo laso, luego de haberse quedado con solo seis aciertos en todo el primer encuentro. El acierto madridista ha ido aplacándose, pero ni siquiera el estratosférico 33-27 del primer cuarto ha terminado de romper el partido, ya que el conjunto merengue ha vuelto a adquirir cierta lógica en su juego con la entrada de Andrés Feliz en lugar de un Llull quien por un momento se ha creído que tiene 28 años y no los 38 que luce.
Kamar Baldwin ha entrado con el mismo trance anotador que sus titulares, algo que ha afianzado la ventaja baskonista arrimándose a la decena, ya que el Real Madrid ha perdido ese toque de los primeros minutos. Ante un Buesa Arena entregado, los gasteiztarras han dado el paso adelante que se les demandaba, como se ha visto en sus defensas, muy agresivas a la hora de meter manos y llegar a todas las ayudas, como en la pelea por los balones divididos.
Durante un instante la renta baskonista ha alcanzado la decena, con un acierto en el triple absolutamente irreal, pero el Real Madrid no se ha caído, y ha conseguido volver a meterse en el duelo con un parcial de 0-7, pasando del 45-35 al 45-42 y tiempo muerto de Pablo Laso, luego de un mate de Bruno Fernando y cinco puntos de Musa, mientras que los Garuba, Hugo González y Bruno Fernando se han dedicado al trabajo sucio defensivo ante un Baskonia con más dificultades cuando ha intentado pisar la pintura.
Casualmente, cuando Chus Mateo ha ensayado una zona 2-3 después de ese tiempo muerto ha sido cuando los gasteiztarras mejor han conseguido sus canastas desde cerca del aro. Sobre todo por la verticalidad de Baldwin y Forrest, jugando juntos otra vez por las dos faltas de Howard, los gasteiztarras han atacado la zona con criterio y cuando Moneke ha establecido el 51-44 tras rebote ofensivo, ha tenido que ser Chus Mateo quien ha tenido que pedir el tiempo muerto. Y ya puestos, el clásico «¡madridista el que no bote es!» ha vuelto a resurgir con nuevos bríos.
No obstante, una jugada de «tres más uno» que ha logrado Facundo Campazzo, sacándole además la tercera falta a Kamar Baldwin, ha vuelto a meter a igualar el marcador. Incluso la apuesta por un quinteto pequeño, con Garuba como único interior, le ha valido al Real Madrid para ser mucho más agresivo en defensa –en exceso no pocas veces–, soltando manotazos a diestro y siniestro y cambiando en los bloqueos, ha servido a los merengues para echarse encima otra vez. Por fortuna, el acierto desde la línea de tiros libres tanto de Forrest –16 puntos al descanso– y Rogkavopoulos han permitido a los baskonistas llegar al descanso con un 56-54 a favor. Eso sí, iba a resultar complicado mantener ese 12 de 16 en triples en la segunda mitad.
Canastas dolorosas
Un parcial de 0-4 del Real Madrid ha adelantado a los blancos fugazmente, en parte por el ˜dos más uno» que ha empleado Forrest para contestar, en parte por los tiros libres errados de forma consecutiva por Tavares y Abalde.
No se ha resignado el cuadro merengue y ha encontrado el acierto de Campazzo en el triple para volver a tomar ventaja, mientras que Tavares, por más que por fin los árbitros le han pitado algunas personales, ha sido una pesadilla en el rebote.

Nuevos grandes minutos de Samanic y Trent Forrest han mantenido el equilibrio en el marcador, aunque el Real Madrid ha ido consolidando su iniciativa en el luminoso, con jugadores como Hezonja o Llull anotando posesiones bien dolorosas y con Bruno Fernando haciendo la labor sucia en la pintura. Durante un instante Trent Forrest se ha retirado lesionado, aunque por fortuna no ha tardado en volver sin aparentes males mayores.
Eso sí, ese contratiempo ha enfriado al Baskonia, que ha empezado a perder el acierto, sobre todo en los tiros libres, mientras que erl Real Madrid, punto a punto, ha empezado a abrir brecha: un triple de Hezonja justo en la jugada previa a su tercera falta, un tapón ilegal de Donta Hall a Hugo González... Pablo Laso ha tenido que frenar el partido poque el resultado se ha puesto por 78-84 a punto de afrontar el último minuto del tercer cuarto, luego de un parcial de 2-7.
Un triple de Luwawu-Cabarrot ha dado nuevo aire al Baskonia, pero el cuarto no ha podido cerrarse peor: un tiro libre de Dzanan Musa, pero sobre todo, el triple de Andrés Feliz justo sobre el límite, estableciendo la máxima renta madridista con elm 81-88, ha supuesto una puñalada directa en el corazón. De pronto se ha visto que los diez minutos por delante podían ser los últimos de la temporada y que se afrontaban con siete puntos de desventaja. Ante todo un Real Madrid.
La renta madridista se ha disparado hasta lam decena y más allá, con jugadas clave como los tapones de Hugo González, Garuba o Andres Feliz, un Andrés Feliz que ha ido creciendo y tomando el timón del partido conforme han pasado los minutos.
Seis puntos seguidos de Tim Luwaweu-Cabarrot han sido el penúltimo arreón de los gasteiztarras, acercándose hasta un 93-98 a falta de cinco minutos. Sin embaergo, la siguiente jugada tras el tiempo muerto de rigor ha sido un triple de Sergi Llull que ha enfriado los ánimos de los más de 12.000 espectadoresm reunidos en el Buesa Arena. Chus Mateo ha mantenido a Hugo González para el marcaje sobre Markus Howard, pero por lo demás, entre Campazzo, Llull, Garuba –otro animal defensivo– y Tavares han saltado para este tramo final ante un Baskonia cada vez más asfixiado, pero que no ha tirado la toalla por puro amor propio. A buenas horas.
Con el 103-108 y el partido a punto de terminar, aún ha habido un triple liberado para Markus Howard. Pero el de Nueva Jersey no ha tenido su día y no ha podido encestar. Y en ese fallo, reboteado por Tavares y rematado por el propio caboverdiano y más tarde por Sergi Llull desde la línea de tiros libres, se han ido las últimas opciones de Saski Baskonia de evitar la eliminación.
Unicaja fuerza el desempate
En la otra eliminartoria de esta parte del cuadro, Unicaja ha respondido de maravilla tras su derrota del martes en su cancha por 97-101. El Barça no ha podido ganar ni un solo cuarto ante los de Ibon Navarro, que han maniatado a los blaugrana y los han derrotado por 59-81. Kendrick Perry, con 15 puntos, 11 de ellos en el primer cuarto, le ha dado el pistoletazo de salida a un Unicaja mucho más centrado que su rival, que ya con el 17-26 del primer acto le ha puesto las cosas claras al conjunto catalán.
Los de Joan Peñarroya, que han firmado un 18 de 46 en tiros de dos puntos y un 5 de 25 en triples, apenas si han aguantado a la estela de los andaluces hasta el descanso, pero un parcial de 13-21 en el tercer cuarto ha terminado de romper el partido en favor de los vigentes campeones de la Copa y la FIBA BCL.
El desempate de esta ronda de cuartos tendrá lugar el domingo a partir de las 18.30, en el Martín Carpena de Málaga.
Rubén Domínguez
En otro orden de cosas, Surne Bilbao Basket ha confirmado este viernes que el escolta Rubén Domínguez, de 22 años y 1,97 metros de altura, no seguirá entre los hombres de negro la próxima temporada. El ex de la cantera de Estudiantes y máximo anotador en la historia de Bilbao Basket en un partido luego de los 35 puntos que anotase en la pista de Leyma Coruña, se irá a la NCAA, con la Universidad Texas A&M.
Aunque en teoría la competición universitaria excluye a los jugadores profesionales, los famosos contratos NIL están llevando a un buen número de jugadores jóvenes a irse a los Estados Unidos a disponer de más minutos que en las competiciones domésticas y ganando más de lo que ganan a este lado del Atlántico.
Domínguez ha promediado 6 puntos y 1,5 rebotes en 13 minutos de juego en la Liga ACB, con un 40% de efectividad en el tiro de tres y un 86,7% desde la línea de tiros libres. En la FIBA Europe Cup, el de Puerto Real ha subido sus prestaciones a 7,6 puntos y 1,8 rebotes en 15 minutos.
FICHA TÉCNICA
SASKI BASKONIA: Trent Forrest (30), Markus Howard (6), Nikos Rogkavopoulos (9), Chima Moneke (13) y Luka Samanic (19) –quinteto inicial–, Kamar Baldwin (8), Tadas Sedekerskis (5), Donta Hall (2) y Tim Luwawu-Cabarrot (11).
REAL MADRID: Campazzo (17), Abalde (5), Hezonja (12), Llull (19) y Tavares (14) –quinteto inicial–, Andrés Feliz (17), González (4), Musa (12), Garuba (4), Bruno Fernando (8) y Ndiaye.
Árbitros: Conde, Padrós y Baena. Han eliminado a Luwawu-Cabarrot y Moneke.
Parciales: 33-27, 23-27, 25-34, 22-24.
Incidencias: 12.154 espectadores en el Buesa Arena, en el segundo partido de cuartos de final de los play-offs de la Liga ACB. Trent Forrest se ha retirado lesionado en el tercer cuarto.

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