
Jasper Philipsen es el primer maillot amarillo del Tour tras imponerse en un esprint reducido en Lille, en una etapa donde el viento ha sido gran protagonista y que ha dejado varios damnificados.
Este sábado ha arrancado la prueba sobre la que pivota el calendario ciclista cada año. Los objetivos de los mejores ciclistas son cada vez más amplios, desde las clásicas de primavera hasta las vueltas de una semana. Pero no hay duda de que el Tour es la punta del iceberg, la prueba a la que todos los mejores ciclistas del mundo intentan llegar en el mejor momento de la temporada.
Y con esa premisa ha salido la prueba desde Lille, envuelto por todos los protocolos y circo que acompañan a la carrera francesa. A diferencia de los últimos años, lo ha hecho con una etapa llana, tras varias ediciones con etapas inaugurales mucho más selectivas que la de hoy. Sin embargo, esto, al contrario de lo que podría parecer, aumenta la tensión. Más si cabe si el viento se convierte en protagonista, como ha sido el caso.
La primera fuga de la edición se ha conformado nada más darse el pistoletazo de salida en Lille, ciudad a la que regresaría el pelotón tras un bucle de 180 kilómetros. Cinco ciclistas y equipos habituales de estas lides han querido formar parte de la misma. Así, Matteo Vercher (Total), Benjamin Thomas (Cofidis), Jonas Rutsch (Wanty), Bruno Armirail (Decathlon) y Mathis Le Berre (Arkea) han cogido enseguida dos minutos de renta. Ahí han cerrado el grifo Lidl-Trek y Alpecin, los equipos de Jonathan Milan y Jasper Philipsen, principales favoritos, junto a Tim Merlier (Quick-Step) al inicio del día.
Pero el viento ha decidido que no era día para pasear. A pesar de que no ha habido un equipo que haya intentado hacer daño, el simple hecho de querer colocar delante a los líderes, ha cortado el pelotón en varias ocasiones a más de 100 kilómetros de meta. Lenny Martinez se ha cortado en cada arreón, también otro hombre importante como Florian Lipowitz ha tenido un problema mecánico en un momento complicado. Al final todo se ha reagrupado, pero no sin dejar víctimas.
La tensión también ha provocado caídas como las de Thibaut Nys, Filippo Ganna y Stefan Bissegger. De hecho, los dos contrarrelojistas han protagonizado los dos primeros abandonos del Tour, unas bajas muy sensibles para sus respectivas escuadras. También se han ido al suelo los dos últimos supervivientes de la fuga, Vercher y Thomas, que han dado con sus huesos en el adoquín del Mont Cassel al luchar por los puntos para el maillot de la montaña, que vestirá mañana el ciclista de Cofidis.
Durante un buen tramo ha vuelto la calma, pero a 20 kilómetros de meta ha sido Visma quien ha llevado al pelotón contra la cuneta y en apenas unos metros se ha hecho el corte, que ha pillado detrás a Remco Evenepoel, Primoz Roglic, Florian Lipowitz, Joao Almeida, Carlos Ródríguez o Santiago Buitrago entre otros. Al final han cedido 38 segundos. Más se ha dejado el joven francés Lenny Martinez, esperanza local, que ha penado durante todo el día y se ha dejado más de nueve minutos.
Alpecin ha hecho valer su superioridad numérica en el corte, con hasta cinco ciclistas, y ha lanzado el esprint a la perfección para que Jasper Philipsen haya impuesto su velocidad por encima de Biniam Girmay y Soren Warenskjold.

Repulsa multitudinaria tras la agresión sexual del viernes en sanfermines

Llueve sobre mojado en Rioja Alavesa: «Hay gran desolación y desánimo entre los viticultores»

Los sanfermines han terminado: cientos de afectados en el último encierro, el de la villavesa

Denuncia contra el Ayuntamiento de Donostia por la vía de acceso al chalet de Xabi Alonso
