Iberdrola obtuvo un beneficio neto de 3.562,2 millones de euros en el primer semestre del año. Esto representa una caída del 13,8% con respecto al mismo periodo del ejercicio anterior, cuando registró plusvalías millonarias por la venta de activos en México. Excluyendo dichas plusvalías, el beneficio neto de Iberdrola crecería un 20%.

La cifra de ventas en el semestre ascendió a 22.637 millones de euros, prácticamente en línea con hace un año. Con estos resultados a junio, el grupo ha reiterado sus perspectivas para el conjunto del ejercicio, con una previsión de un aumento de dos dígitos en el beneficio neto, teniendo en cuenta el reconocimiento de costes pasados en los Estados Unidos, ya registrado, y sin contar con las ganancias de capital por la rotación de activos.

En lo que respecta a las inversiones de la eléctrica en el semestre, crecieron un 7%, hasta los 5.661,7 millones de euros, con un aumento en el negocio de Redes del 14%, hasta los 3.081,9 millones de euros y representando el 54% del total de inversiones. En los últimos doce meses Iberdrola realizado unas inversiones récord de 17.300 millones de euros y cuenta con más de 157.000 millones de euros de activos.

La inversión en el negocio Renovable alcanzó los 2.155,2 millones de euros, de los que más del 60% corresponden a inversiones realizadas en Gran Bretaña y Estados Unidos,  el 40% destinadas a eólica marina.

Cotización suspendida

En este marco, Iberdrola ha acordado lanzar una ampliación de capital acelerada por un importe de 5.000 millones de euros para acometer nuevas oportunidades de inversión en redes eléctricas en Estados Unidos y Gran Bretaña en base a los nuevos marcos tarifarios.

Tras este anuncio, la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) ha decidido suspender esta mañana «cautelarmente, con efectos inmediatos» la cotización de Iberdrola, por concurrir «circunstancias que pudieran perturbar el normal desarrollo de las operaciones» sobre el citado valor.