Los realistas felicitan a Remiro por uno de sus paradones mientras Pedri se lamenta incrédulo.
Los realistas felicitan a Remiro por uno de sus paradones mientras Pedri se lamenta incrédulo. (Josep LAGO | AFP)
Imanol  Intziarte
Redactor de actualidad, con experiencia en información deportiva y especializado en rugby

La Real muere de pie con un Remiro descomunal y un enorme sacrificio físico

Los donostiarras se han adelantado con un gol de Odriozola, que ha entrado en el once a última hora por lesión de Aramburu, pero Koundé y Lewandowski han volteado el marcador para el Barcelona (2-1).

La cosecha de puntos sigue siendo exigua, pero la Real sale de su visita al Barcelona con la convicción, de puertas adentro y de puertas afuera, de que es un equipo que puede plantar cara a cualquiera y de que tiene capacidad para defender con el cuchillo en la boca a base de sacrificio. 

Hansi Flick ha tenido que echar mano de su gran estrella, Lamine Yamal, para desatascar un partido que se le estaba complicando. La primera parte ha sido un ejercicio de defensa numantina de los blanquiazules (14% de posesión al descanso), que en la segunda mitad han sacado las garras para pisar con peligro el área rival.

De cara al tercer partido en nueve días, Sergio ha metido cinco cambios respecto al once inicial frente al Mallorca. Sergio Gómez y Brais, titulares en los dos últimos choques, han cedido su plaza a Aihen y Turrientes. Además, Marín ha regresado por un Soler al que el técnico viene dosificando, y Guedes ha suplido a un Kubo cuyo tobillo anda renqueante.

A ello se ha sumado a última hora la titularidad de Odriozola, ya que Aramburu se ha lesionado durante el calentamiento y Aritz tampoco está disponible. En total, ocho jugadores que han pasado por el Sanse más el experimentado Remiro y dos de los fichajes de este verano.

Brazalete negro por Josetxo Arakistain

Los donostiarras han saltado al césped de Montjuic con brazaletes negros por el fallecimiento de Josetxo Arakistain a los 88 años de edad. El azkotiarra fue portero del equipo blanquiazul entre 1956 y 1961, antes de fichar por el Real Madrid, con el que ganó la Copa de Europa en 1966.

Por su parte, el Barça llegaba con bastantes bajas y un ojo puesto en el próximo partido de Champions contra el PSG, vigente campeón, por lo que Hansi Flick ha tirado de rotaciones, destacando el estreno del centrocampista gallego Pedro 'Dro' Fernández, última perla de La Masía con 17 años. No estaban ni el portero Joan García ni Raphinha, mientras que Lamine Yamal ha entrado en la convocatoria en el último momento.

El primer remate ha llevado color visitante, con una falta botada por Guedes que Oyarzabal ha cabeceado demasiado cruzada. Más peligro ha tenido un disparo de Rashford en un córner de diseño que ha obligado a lucirse a Remiro con un paradón impresionante.

Conexión donostiarra en el 0-1

La Real aguantaba atrincherada en su campo y con las líneas muy juntas, ante un Barça que probaba de lejos. Y de repente la sorpresa, en una contra el balón llega a Barrene, quien desborda a Koundé para asistir a ¡Odriozola!. Conexión donostiarra para el 0-1 en el minuto 31, con un goleador que en agosto estaba con pie y medio fuera y llevaba nueve meses sin jugar. Ni en Netflix.

Remiro ha vuelto a salvar a los suyos con otra manopla milagrosa en balón que ha golpeado Zubeldia hacia su propia portería. Como no hay dos sin tres, el de Cascante ha impedido el empate en un disparo raso de Roony. Pero tanto va el cántaro a la fuente que Rashford ha botado un córner al primer palo –los realistas habían protestado al entender que era saque de puerta– y Koundé se ha elevado para cabecear a la red (1-1, m.43).

Una pena, porque el ejercicio defensivo estaba siendo notable. Frente a la oleada de pesimismo colectivo, la Real ha aguantado el tipo en esos primeros 45 minutos, sustentada por un portero en estado de gracia y el sacrificio físico de sus diez compañeros.

La Real ha empezado bien la segunda mitad, con dos centros de Guedes y Aihen que no han encontrado rematador. Sergio movía el banquillo para dar oxígeno a su equipo. Un agotado y meritorio Odriozola cedía su lugar a Sergio Gómez, mientras que Kubo entraba por Guedes.

Yamal marca diferencias

Flick no las tenía todas consigo, y daba entrada a Yamal. Un minuto ha tardado el chaval en desbordar por la izquierda y asistir para el testarazo de Lewandowski (2-1, m.59). Es un jugador diferencial, de esos que surgen con cuentagotas y que deciden partidos.

La Real no ha tirado la toalla y ha tenido dos ocasiones consecutivas en las botas de Oyarzabal. El muerto estaba muy vivo aún. Soler y Brais han entrado por Turrientes y Marín, neuronas frescas para la medular. Mientras, Remiro seguía con su festival ante dos disparos de Rashford y Olmo.

Sergio se ha gastado su última bala con la entrada de Sadiq por un Barrene que se ha marcado otro gran partido, uno más esta temporada, tanto en ataque como en defensa.

La Real ha tenido el empate tras un robo que ha terminado con un disparo de Kubo al larguero, y en la contra Lewandowski ha perdonado el tercero a bocajarro, con un balón que ha tocado el larguero y ha botado en la raya antes de salir escupido. Los blanquiazules lo han seguido intentando hasta el 95, pero no han podido rescatar al menos un punto.