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La Fiscalía mantiene los siete años de prisión para el expresidente de la DYA Bizkaia

El expresidente de la DYA Fernando Izagirre ha negado en juicio estar detrás del presunto desfalco de unos 5 millones de la ONG, y ha asegurado que no tiene «ni idea» de contabilidad. La Fiscalía solicita de siete años de prisión y la devolución de 4,7 millones de euros.

Fernando Izaguirre durante su etapa al frente de la DYA.
Fernando Izaguirre durante su etapa al frente de la DYA. (H. BILBAO | EUROPA PRESS)

La Fiscalía mantiene su acusación por delitos continuados de administración desleal y falsedad documental contra el expresidente de la DYA y el exdirector de Emergencias del Gobierno de Lakua Fernando Izagirre, para el que solicita siete años de prisión, y su socio, para el que pide cuatro años de prisión. Asimismo, reclama la devolución a la DYA de 4,7 millones de euros que fueron transferidos a varias sociedades.

La Sección Sexta de la Audiencia de Bizkaia ha acogido este martes y miércoles el juicio contra el que fuera director de la DYA desde 2016 a 2021 y con anterioridad su coordinador, y su socio en varias empresas. Tras la declaración de los acusados y de que todas las partes reiteraran sus peticiones iniciales en esta segunda jornada, el juicio ha quedado visto para sentencia.

La Fiscalía y las acusaciones particulares que representan a DYA Bizkaia y Emergencias Plus (creada por la ONG vizcaina junto a Ambulancias Barcelona) acusan a los dos encausados por el traspaso de diversas cantidades desde la ONG a Emergencias Plus por un importe superior a los 5 millones, del que 4,7 millones habrían sido transferidos a su vez desde Emergencias Plus a Ambulancias Barcelona y otras sociedades en las cuales ellos eran administradores o socios y en las que DYA no tenía participación.

Tras lo ocurrido, DYA entró en concurso de acreedores y Emergencias Plus tuvo que solicitar su disolución como sociedad y el concurso de acreedores, según ha recordado la abogada de esta última entidad.

La sesión de este miércoles ha comenzado con las declaraciones de los dos acusados, que han contestado únicamente las preguntas de Fiscalía y de sus defensas. Izagirre ha asegurado ante el tribunal que él no tiene «ni idea de contabilidad» y confiaba tanto en la persona que la llevaba como en la asesoría y ha subrayado que «toda la documentación» sobre las decisiones que se fueron adoptando se quedó en las oficinas de la DYA.

El expresidente de DYA ha explicado que, ante el «panorama complicado» en 2005, se decidió en esta entidad buscar fórmulas para concurrir a concursos públicos de las distintas instituciones. Con este objetivo, ha dicho, se creó Emergencias Plus junto a Ambulancias Barcelona (de la que fue socio el otro acusado en el caso hasta 2013), inicialmente con Agrupación de Interés Económico, aunque luego se transformó en sociedad mercantil. En toda su actuación, ha asegurado, «el objetivo siempre fue la DYA». «Mi ambición no era ser propietario de una empresa de ambulancias», ha afirmado.

Por su parte, el otro acusado ha explicado que Ambulancias Barcelona se alió en el proyecto de Emergencias con DYA por el «prestigio» de esta entidad y fue la empresa catalana la que aportó «todo» a la Agrupación de Interés Económico, que, según ha indicado, llegó a facturar «casi 31 millones» hasta el momento de su marcha.

Según ha relatado, con el objetivo de que Emergencias Plus «cogiera volumen», se decidió «sacrificar» Ambulancias Barcelona, que traspasó contratos «a coste cero» y fue asumiendo las pérdidas, de forma «pactada» entre socios.

Acusaciones

Las acusaciones consideran que en el proceso ha quedado acreditado que las operaciones se realizaron sin conocimiento de la Junta Directiva y la asamblea de DYA y sin que, en palabras del abogado de esta entidad, exista «justificación documental alguna».

Según ha asegurado, en DYA Bizkaia se eliminó «todo tipo de control interno» desde que en 2005 Izagirre accedió al cargo de coordinador y se «unificaron las cajas» de todas las delegaciones, con lo que el acusado «de facto asume control de toda la caja».

El abogado ha subrayado que DYA «no persigue negocios en ninguna parte», sino que es una sociedad no lucrativa, y, por tanto, ha rechazado que lo sucedido se pueda explicar como «negocios fallidos de un grupo de empresas». A su entender, los acusados diseñaron «una operación concertada para traspasar fondos mediante sociedades interpuestas» y «falseando documentación societaria y contable para mantener mercantiles con patrimonio negativo».

La fiscalía solicita siete años de prisión para el expresidente de DYA por delitos continuados de administración desleal y falsedad documental y para su socio, para el que pide cuatro años de prisión. Por su parte, las acusaciones particulares solicitan ocho años en el caso de DYA por el primero de los delitos, así como tres adicionales por el segundo, y de seis en el de Emergencias Plus.

DYA pide, además, que le sean devueltos 5,4 millones de euros traspasados «sin justificación». La Fiscalía, por su parte, propone una indemnización de 4,7 millones, los correspondientes a las cuantías que salieron de Emergencias Plus, ya que en esta entidad sí participaba DYA. La abogada de Emergencias Plus también solicita esa misma cantidad traspasada «sin justificación ni soporte alguno».

Absolución

Los abogados de los acusados, por su parte, han solicitado la absolución de sus defendidos y han defendido no se debería abordar el caso en el ámbito penal. El letrado de Izagirre, que ha advertido de la «dificultad probatoria» en «un recorrido de 20 años», ha insistido en que su defendido no manejaba la contabilidad de DYA ni de Emergencias Plus. Además, ha considerado que la DYA no es «un inocente tercer perjudicado» porque está en «el plan de negocio».

El abogado del otro acusado ha criticado «los mantras» escuchados en el proceso, como el que apunta a que no exista «justificación documental» o la afirmación de transferencias a sociedades que se crearon «en 2012», por lo que es «imposible» que se produjeran.