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Piden que el Cristo de Urgull sea calificado como contrario a la memoria democrática

El debate sobre el Sagrado Corazón de Urgull que domina Donostia no cesa. Una iniciativa ha planteado ahora que sea calificado por el Ejecutivo español como símbolo contrario a la memoria democrática.

La comparecencia, ante la Subdelegación española en Gipuzkoa.
La comparecencia, ante la Subdelegación española en Gipuzkoa. (Gorka Rubio | Foku)

La asociación de víctimas del franquismo Avicge de Donostia, el sindicato CNT y el Partido Comunista de Euskadi (PCE-EPK) han solicitado formalmente al Gobierno español que incluya la escultura del Sagrado Corazón del monte Urgull en el Catálogo de elementos contrarios a la memoria democrática.

Lo han hecho registrando este viernes un escrito en la Subdelegación del Gobierno en Gipuzkoa, dirigido a la Secretaría de Estado de Memoria Democrática, en el que justifican su legitimidad para cursar dicha petición y exponen, con abundante documentación, «los fundamentos historiográficos y jurídicos» que la avalan.

Cuatro miembros de la Asociación de Víctimas del Genocidio de Donostia (Avicge) han explicado a los medios informativos sus argumentos, en una comparecencia delante de la Subdelegación en la que han estado arropados por los concejales Arantza González (Elkarrekin) y Markel Ormazabal (EH Bildu), integrantes a su vez del Grupo de Simbología franquista del Consejo Asesor de Memoria Histórica del Ayuntamiento donostiarra.

Pilar Pingarrón Zumeta, hija de Antonio Pingarrón, «represaliado y desaparecido forzado» cuando era sargento de las milicias del Partido Comunista de Euskadi, ha asegurado que en la solicitud aportan suficiente documentación para dejar «acreditado» que la gran estatua que corona Urgull cumple los requisitos para considerarse símbolo de exaltación del régimen franquista.

La leyes de memoria democrática estatal de 2022 y autonómica de 2023 amparan su petición «en defensa del derecho al honor y a la dignidad» de las víctimas y familiares, según consta en el escrito y ha remarcado Pingarrón.

¿Derribo?

«Confiamos en que sea tenida en cuenta y se incorpore al citado Catálogo lo antes posible», ha señalado la mujer, de 88 años, que ha rememorado cómo, a ella, el Sagrado Corazón le «trae desde muy niña, muy malos recuerdos» porque le «hace recordar todas las vivencias, de hambre y .... todas esas cosas que hemos pasado».

Preguntada por si quieren que el monumento sea derribado, ha contestado con un rotundo «sí, que se elimine», extremo que sin embargo ha matizado otro miembro de la asociación, Mikel Pascual Maiza, que ha advertido de que sobre eso «cada persona tiene un deseo diferente».

Pascual Miza, que se ha definido como víctima directa del franquismo y la represión, ha insistido en que el Sagrado Corazón de Urgull «incumple claramente» la legislación vigente y «las pruebas son claras», entre las que ha destacado el acta del Ayuntamiento de Donostia del 31 de mayo de 1939.

Según figura en ese documento municipal se aprobó la construcción con el fin de «perpetuar, en una expresión grandiosa», a «los mártires de la cruzada nacional», a la vez que recoger su «espíritu fundamentalmente religioso».

Los miembros de la asociación Avicge han recordado que el pasado junio ya pidieron al Ayuntamiento que solicitara al Estado que incluyera el Sagrado Corazón en el Catálogo, tras un informe del Grupo de Simbología del Consejo Asesor, en el que participan también entidades memorialistas, pero al no prosperar han decidido hacerlo ahora directamente.