Agustin Goikoetxea
Aktualitateko erredaktorea / Redactor de actualidad

Ecologistas instan a actuar en los 1.562 vertederos abandonados de Araba, Bizkaia y Gipuzkoa

Ekologistak Martxan insta a las distintas administraciones a actuar en los 1.562 vertederos abandonados de Araba, Bizkaia y Gipuzkoa, 1.120 de ellos peligrosos. Presenta una herramienta informática para hacer accesible la información sobre estos suelos contaminados.

Representantes de Ekologistak Martxan en la presentación.
Representantes de Ekologistak Martxan en la presentación. (Marisol Ramirez | FOKU)

Ekologistak Martxan ha presentado este martes en Bilbo una herramienta informática con la que quiere visibilizar la realidad de los 1.562 vertederos abandonados detectados en Araba, Bizkaia y Gipuzkoa, de ellos 1.120 peligrosos, según distintos parámetros. Desde el colectivo han citado varios casos en que, a pesar de las denuncias realizadas hace años, las distintas administraciones no actúan y cuando lo hacen, han incidido, se hace porque existen proyectos de interés económico en esos espacios.

La situación de los suelos potencialmente contaminados preocupa por su repercusión en la calidad del aire, suelo, agua y salud de las personas. Con el ánimo de resolver este problema, «que nos hipoteca el futuro», Ekologistak Martxan ha desarrollado una herramienta informática para visibilizar cómo atender estos vertederos, «ya que es necesario caracterizar estos suelos en los que se asientan, para conocer su contenido y afecciones, declararlos como suelo contaminado y proceder a su clausura y sellado o regeneración, obligatorio desde 2008».

La información base empleada procede de Ihobe, a la que los ecologistas han sumado la que han ido recopilando tras años de trabajo y ahora quieren que la ciudadanía pueda acceder a ella para realizar aportaciones y reclamar soluciones. Además, esperan que el Ejecutivo de Lakua y otras administraciones cumplan y hagan cumplir las leyes y normativas, y que, de manera conjunta y desde el trabajo colaborativo, conformando una mesa de trabajo con todos los agentes implicados, afronten un plan de acción con un calendario.

Es precisamente que no se avance en el tratamiento y sellado de los vertederos abandonados lo que les preocupa. El inventario de suelos que soportan o han soportado actividades o instalaciones potencialmente contaminantes registra 1.562 vertederos en la CAV: 258 en Araba, 616 en Bizkaia, 451 en Gipuzkoa y 237 sin documentar o sin ficha, solo con una parcela registrada.

Si se han superado todos los plazos para la intervención en las escombreras, parecido sucede con otra directiva que establecía normas para detener el deterioro del estado de las masas de agua de la UE y conseguir un «buen estado» de ríos, lagos y aguas subterráneas en 2015. «Se ha pedido prórroga tras prórroga. Todo son buenas palabras pero no acaba de afrontarse esta asignatura pendiente», ha expuesto Javi Vázquez, que ha llamado a las instituciones «a ponerse las pilas».

Cuatro ejemplos

El veterano activista ecologista y abogado Carlos Alonso ha aportados detalles de cuatro ejemplos, como el del antiguo vertedero de basuras de Artxanda, en el monte San Bernabé, que se clausuró en 1976, donde la empresa Berriz Recycling puso en marcha un nuevo proyecto, que ha obligado a la restauración de la vieja escombrera a causa de los derrumbes y la aparición de lindano. Cerca de ese lugar, en 2019, también se denunció la existencia de ese peligrosos contaminante.

En el cordal de Artxanda, entre Enekuri y Santo Domingo, según Ekologistak Martxan, hay 15 vertederos, de ellos 4 peligrosos. No muy lejos, en Sondika, se encuentra el antiguo vertedero de residuos industriales de la empresa Asua Products, donde se arrojaron hace algo más de dos décadas materiales que eran empleados para la estabilización de pinturas y plásticos. Sus lixiviados, a pesar de la denuncia realizada en marzo de 2021, siguen vertiendo al río Asua, uno de los más contaminados de la CAV.

Otro ejemplo es el del antiguo vertedero de Etxe-Uli en Santurtzi, por donde discurre el río Ballonti. Vázquez ha denunciado que durante décadas «no se ha hecho nada» y en 2024 distintas administraciones firmaron un convenio que posibilitará la construcción de un nuevo polígono industrial. «Ver para creer. Veremos si se limpia y se recupera el río», ha apostillado.

También ha citado otro vertedero ubicado en Jata, donde se depositaron hasta hace unas décadas los residuos sólidos urbanos de Mungia y se ha detectado lindano a partir de un derrumbe en 2017. Según ha indicado, están previstas distintas actuaciones para la recogida de lixiviados para 2026.

«Todos estos son perfectamente conocidos por las administraciones desde hace décadas y, desde hace décadas, llevan contaminando el medio ambiente sin que se actúe; no es un problema de desconocimiento, sino de falta de voluntad política», ha destacado Alonso.

Además, el colectivo ha denunciado que «cuando se actúa en estos suelos contaminados se hace por un interés económico, no se actúa para limpiar y renaturalizar estos suelos sino para nuevas actividades de interés económico, como la limpieza de los suelos en Barakaldo para el desarrollo de Megapark, la ampliación del aeropuerto en Loiu o el proyecto de polígono industrial en los terrenos del vertedero de Etxe Uli».