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«Cruce copero» de Saski Baskonia en su visita a Gran Canaria

El debut de Eugene Omoruyi, la decisión gasteiztarra de qué extracomunitario descartar y la necesidad de ganar fuera de casa para asegurar su presencia entre los ocho mejores de la ACB al final de la primera vuelta le dan a este duelo del sábado una importancia capital.

Markus Howard alcanzó su mejor nivel frente a Gran Canaria.
Markus Howard alcanzó su mejor nivel frente a Gran Canaria. (Endika PORTILLO | FOKU)

Octavo en la Liga ACB con un balance de 4-5, Kosner Baskonia afronta este sábado a las 20.00 –horario de Euskal Herria– un duelo que es casi un cruce de Copa. La cancha de Gran Canaria no se le da muy bien, por más que su último triunfo, el 11 de diciembre de 2022, se saldase con un apoteósico 68-94, con 34 puntos de Markus Howard, autor de 9 triples, saliera ovacionado y casi a hombros de la cancha grancanaria.

Desde aquella exhibición el cuadro gasteiztarra no sabe lo que es ganar en ese pabellón, y desde luego que para no clasificarse para las dos últimas ediciones de Copa, caer en Las Palmas ha sido uno de los golpes más dolorosos. Así las cosas, y a pesar de que jugar lejos de Zurbano viene siendo un suplicio para los de Paolo Galbiati, toca recuperarse y sacar el mejor juego para derrotar a un rival directo que, además, con un balance de 3-6, se quedaría cerca de caer descabalgado de las ocho primeras plazas al final de la primera vuelta de la competición doméstica.

Obviamente, aun en caso de derrota habría margen de corrección y no sería ninguna catástrofe, pero todo apunta que los gasteiztarras, incluso entrando en el Top 8 de la ACB para colarse para disputar la Copa, van a tener que lucharlo hasta la última jornada, y por tanto, más le vale ir adelantando trabajo.

Será además un partido en el que es más que posible el debut de Eugene Omoruyi, llegado de urgencia tras la operación de Tadas Sedekerskis. Habrá que ver si el nigeriano se puede manejar como exterior o como interior a pesar de que sus 1,98 metros pudieran parecer algo cortos –mismo tamaño que Chima Moneke, por cierto–.

Asimismo, con el retorno de Trent Forrest, habrá que ver si Paolo Galbiati apuesta por darle juego a él o si en el duelo entre Simmons y Nowell alguno de los dos tiene alguna chance para quedarse en Gasteiz. Simmons termina su relación contractual el 18 de este mes, pero es del gusto técnico baskonista, mientras que Nowell apenas si pisa el parqué, pero según se ha ido indicando desde diversos medios de Gasteiz, tiene un contrato garantizado con el Baskonia, por lo que se le debería abonar su salario hasta final de campaña en caso de que la entidad baskonista decida cortarlo.

Con todo este embrollo de nuevos nombres propios y precipitadas decisiones vive este Kosner Baskonia, mientras que intenta que su mejora paulatina lejos de casa por fin le dé réditos. Solo ha conseguido ganar en Granada lejos de Gasteiz en lo que va de temporada, pero en sus últimos partidos de Euroliga frente a Zalgiris y Real Madrid la mejoría ha sido evidente. Aún el resta un poco de regularidad en su juego, ya que los bajones en momentos determinados han sido utilizados por lituanos y madridistas para voltear resultados adversos y terminar por llevarse los partidos. Pudiera pensarse en que Gran Canaria tiene menos calidad que Zalgiris y Real Madrid y que su m ala temporada en la ACB los vuelve especialmente vulnerables. Ahora bien, confiar en la vulnerabilidad ajena cuando uno peca de inconsistencia es cuando menos aventurado.

«Estamos creciendo y tenemos que seguir construyendo nuestra identidad. Nos faltó un poco más de determinación, no fuimos disciplinados en defensa, creo que podemos hacerlo mejor. Cuando jugamos juntos somos un tipo de equipo y cuando empezamos a botar el balón e intentar salvar situaciones individualmente, somos otro», dijo Paolo Galbiati tras el duelo de Euroliga del jueves en Madrid. Visto lo visto, Gran Canaria podría ser una plaza ideal... si la tradición no dijese otra cosa.

Aguas turbias

En lo que se refiere al propio Gran Canaria, cabe decir que el equipo entrenado por Jaka Lakovic focaliza precisamente en la capacidad atlética gasteiztarra, algo en lo que el equipo claretiano algo un poco corto, amén de que los resultados adversos estén haciendo que las aguas estén bajando más turbias y turbulentas que en ocasiones anteriores.

«Tienen mucho potencial atlético y un estilo de juego rápido y dinámico. Estamos preparados para recibir una mejor versión del Baskonia y nosotros estar acordes a su nivel. Debemos jugar un partido muy físico, proteger los primeros segundos de las posesiones defensivas y la línea de tres antes sus mejores anotadores. Queremos mejorar la eficiencia ofensiva y mantener nuestra dureza defensiva, tanto en transición como en estático», ha desgranado.

Cuestionado por el apoyo público que le brindó el presidente del Gran Canaria, Sitapha Savané, Lakovic ha destacado que se siente «bien anímicamente» y que ha recibido este respaldo durante sus cuatro años en el club, tanto de la afición como de todos los estamentos del club grancanario. «Trato de aislarme y focalizarme en mis tareas de entrenador».