La ONU refuerza las medidas para combatir la financiación del ISIS
El Consejo de Seguridad de la ONU reforzó ayer las medidas para cortar las vías de financiación de los yihadistas del Estado Islámico (ISIS) con la adopción de una amplia resolución respaldada por unanimidad. El presidente ruso, Vladimir Putin, había anunciado su apoyo al señalar que Rusia y Estados Unidos coinciden «en los aspectos claves» de los pasos a dar en la búsqueda de una solución política a la guerra en Siria.
La resolución 2.253 aprobada ayer por unanimidad por el Consejo de Seguridad de la ONU pretende combatir la financiación del Estado Islámico (ISIS) multiplicando la presión con sanciones y políticas diseñadas específicamente para responder a la forma en la que este grupo yihadista obtiene sus fondos, que en buena parte proceden de la venta de petróleo.
El texto, presentado por EEUU; fue aprobado en una reunión sin precedentes, en la que por primera vez en la historia los miembros del Consejo estuvieron representados por sus ministros de Economía.
«Hoy, Daesh (acrónimo en árabe del Estado Islámico) maneja una economía multimillonaria en territorios bajo su control. Los terroristas de Daesh logran dinero con el comercio de crudo, la extorsión, los envíos de efectivo no detectados, los rescates en secuestros, el tráfico de personas y armas y los sobornos», recordó el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon.
Hasta ahora, las sanciones de la ONU contra el ISIS estaban englobadas bajo el régimen de medidas contra Al Qaeda y grupos vinculados, pero a partir de ayer esa lista cambiará de nombre para apuntar directamente también a esta organización.
La resolución, que refuerza otras medidas anteriores, exige a todos los países que adopten de leyes que criminalicen la financiación de los yihadistas y les reclama acciones más decididas para cortar los flujos financieros hacia el ISIS.
Obliga a todos los estados miembros a informar en un plazo de 120 días de las medidas que han tomado para estrangular las finanzas del grupo. También les anima a remitir a la ONU más nombres de personas o entidades sospechosas de respaldar con dinero al grupo, que podrán ser objeto de congelaciones de activos, prohibiciones de viaje y otras sanciones.
El presidente ruso, Vladimir Putin, había tendido horas antes una mano a EEUU al anunciar que apoyaría esa «aceptable» resolución, que el canciller estadounidense, John Kerry, le presentó el martes en el Kremlin, por considerarla una iniciativa que demuestra que EEUU y la Unión Europea están «preocupados» por lo que ocurre en Siria, Irak y Yemen.
Destacó que los planes de Rusia para el arreglo político del conflicto en Siria, «en principio, coinciden, en los aspectos clave, aunque pueda parecer extraño, con los estadounidenses».
Putin afirma que ambos bandos deben hacer concesiones en Siria
El presidente, Vladimir Putin, insistió ayer en la necesidad de buscar una solución política para poner fin a la guerra en Siria señaló que las dos partes enfrentadas deberán hacer concesiones. «A la hora de intentar solucionar un conflicto sangriento que se prolonga durante tantos años, siempre es posible encontrar un compromiso, pero las concesiones deben venir de ambas partes», indicó. «No hay otro modo para arreglar esta situación», agregó Putin.
Recordó que el plan consensuado en Viena incluye promulgar una nueva Constitución y celebrar elecciones.
No obstante, dejó claro que Moscú no tolerará que nadie imponga lo que debe ocurrir en el futuro en Siria, incluido el futuro de Bashar al-Assad, principal punto de fricción.
Señaló, además, que los bombardeos aéreos en Siria contra objetivos yihadistas continuarán «hasta el final» mientras el régimen sirio siga necesitando apoyo y apuntó que esa ayuda se extenderá también a la «oposición armada» que combate al ISIS. Pero aclaró que sus tropas podrían retirarse en dos días.
En su multitudinaria rueda de prensa anual, Putin amenazó a Turquía con represalias en caso de nuevas provocaciones –como el derribo del caza ruso en la frontera siria– o si la aviación turca viola el espacio aéreo de Siria. Dio prácticamente por rotas las relaciones con el líder turco, Recep Tayyip Erdogan.GARA