1,5 metros de distancia y 60% de aforo, pautas en la CAV tras el fin del estado de alarma a medianoche
El Gobierno de Lakua ha confirmado que esta próxima medianoche, a las 0.00 del viernes, acaban los casi cien días de excepcionalidad vía estado de alarma. La nueva normalidad se regulará en la CAV con los criterios estatales como base y matices desde la CAV: mascarillas, 1,5 metros de distancia y aforos del 60%.
El Gobierno de Lakua ha decidido este jueves en consejo extraordinario que se supera la fase 3 de la desescalada y se deja sin efecto el estado de alarma. Araba, Bizkaia y Gipuzkoa atraviesan por tanto las últimas horas en este periodo excepcional que se ha prolongado casi cien días. Caducará a las 0.00 de este viernes, lo que se traducirá por ejemplo en la recuperación de la movilidad con Cantabria según se avanzó ya el martes.
Según ha considerado el portavoz, Josu Erkoreka, con esta medida la CAV «recupera todas las atribuciones y competencias» que habían quedado en manos del «mando único» estatal en estos más de tres meses.
La nueva fase –llamada nueva normalidad por Madrid y también Gasteiz– se regulará en base a los criterios estatales ya conocidos (como el uso obligatorio de mascarillas), pero matizados por una orden de Salud «que determina medidas de vigilancia y control para este nueva etapa. Será un marco regulador propio, de acuerdo con nuestra realidad sanitaria, social y económica», ha dicho Erkoreka.
Aunque la directiva es de Salud, ha sido la consejera de Desarrollo Económico, Arantxa Tapia, quien ha explicado los planteamientos para la etapa que se abre desde medianoche y que se prolongará (Erkoreka lo ha remarcado) hasta que exista una vacuna.
Tapia ha subrayado que «autoprotección y prevención» serán los pilares de este futuro próximo. Las normas a cumplir «todos los días» serán el lavado de manos y las mascarillas, ha dicho, obligatorias en espacios como el transporte público.
«La distancia pasa a ser de 1,5 metros para todas las ocupaciones», ha indicado Tapia. Se trata de la distancia que fijó el Gobierno español en un curioso pacto político con Ciudadanos. Hasta el momento, y así constaba por ejemplos en los carteles en los centros de Osakidetza, la referencia eran 2 metros.
Los aforos permitidos pasan a ser, de modo general, del 60% en locales, hoteles, piscinas, discotecas... aunque con posibilidad de llegar al 100% según las condiciones (básicamente si se puede mantener ese metro y medio de distancia física).
Para espectáculos deportivos también se permite este 60%, aunque con límites como 1.000 personas en total en el caso de espacios abiertos. ¿Significa esto que podrá haber público en los estadios vascos?, se le ha planteado inmediatamente a Tapia: la consejera ha recordado que ahí existe otra barrera, puesto que es el necesario aval del Consejo Superior de Deportes, que por el momento no se plantea tal apertura de puertas.
Más medidas, coincidentes con los criterios estatales: Desaparecen todas las franjas horarias. Se recupera la movilidad, con Cantabria desde medianoche y con el resto en los próximos días, en la medida que vaya concluyendo el estado de alarma por zonas y el lunes se abra la muga entre estados. También empezarán a rodar ascensores públicos o funiculares, ha dicho Tapia.
A la vez que Catalunya y gracias a Osakidetza
La decisión se ha conocido a la vez que en Catalunya ha hecho otro tanto Quim Torra, al igual que Iñigo Urkullu con su firma en el decreto correspondiente.
En un somero balance de estos meses, Erkoreka ha agradecido el esfuerzo del colectivo sanitario y destacado como hecho relevante la suspensión de las elecciones del 5 de abril, fijadas finalmente el 12 de julio.
Al hablar del paso a esta «nueva normalidad», la consejera de Salud, Nekane Murga, ha puesto el valor la «gran capacidad de diagnóstico» de Osakidetza, que cree que se ha probado en el control de los brotes producidos precisamente en dos de sus hospitales: Txagorritxu y Basurto. Murga lo ha ejemplificado en que «se han hecho ahí 6.000 pruebas PCR en diez días».
«A mayor movilidad, más importante son el uso de las mascarillas y el distanciamiento», ha alertado Murga sobre la nueva fase que se abre, apelando a la responsabilidad individual y colectiva.