Los finalistas eligen material para la final con tacos solo en la derecha de Martija

Sin críticas a lo encontrado en el cestaño, Laso-Imaz han buscado pelotas más vivas, han tardado algo más de tiempo y, a pesar de no haber ninguna crítica, ha quedado la sensación de que hubieran querido algo más para su estrategia de evitar que Altuna entre en juego.

La decisión empresarial de elegir los lotes para la final con cierta antelación ha surtido efecto, al menos en cuanto a eso de evitar las críticas de los pelotaris en las vísperas de las grandes citas, algo que, por el contrario, también deja la sensación de que lega en meros actos protocolarios eventos como el de hoy en el Bizkaia, con muy poca presencia de aficionados o curiosos. Y los propios pelotaris también ponen de su parte en este sentido si, como hoy, solo Martija se pone los tacos en su derecha para apartar las pelotas con las que se jugarán las txapelas el domingo.

A todo esto hay que sumar un cambio de fechas en el apartado que también parece venir para quedarse, ya que si hasta ahora las elecciones para las finales venían realizándose históricamente los jueves, esta vez ha sido un miércoles la fecha escogida por las empresas. Y es esta última la razón esgrimida por los protagonistas para explicar los motivos por los que han saltado a la cancha sin proteger sus herramientas. En el caso de los de Aspe, Jokin Altuna ha apuntado que el cambio sí que les ha generado variaciones en su habitual hoja de ruta a las finales, que entrenaron fuerte el lunes y que tienen previsto volver a hacerlo mañana y que han preferido dar descanso a su manos, si bien Martija no ha tenido problemas en cubrirse su derecha para elegir las que mejor le entraban en la mano.

En el caso de los de Baiko, ninguno de los dos ha golpeado las pelotas que se han encontrado en el cestaño y ha sido Gorostiza el que se ha encargado de lanzar la pelotas contra el frontis, una práctica que, por otro lado ya han empleado durante las semifinales con éxito. Además, Laso e Imaz han entrenado hoy por la mañana antes de la elección en el escenario de la final y como no les gusta estar mucho tiempo con los tacos puestos, han optado por esta opción.

Similares pero distintas

No obstante, han sido los de Baiko los que más tiempo han empleado en la elección y, aunque en la posterior rueda de prensa no haya habido críticas veladas a lo encontrado, sí que ha quedado la impresión de que hubieran querido encontrar material un poco más vivo. «Estaban elegidas desde hace tiempo y parecían algo más bajas de lo que ha habido otras veces pero luego es verdad que en el partido se calientan y son completamente distintas», ha apuntado Unai Laso.

Eso sí, ha dejado entrever cierto malestar al explicar que «queremos evitar a Jokin Altuna, atrasar la pelota y para eso necesitamos pelotas rápidas. Dos de las de ellos son bastante más bajas para llevar el juego adelante o para endurecer el partido y las nuestras son más vivas».

Jokin Altuna, por su parte, ha mostrado su conformidad con lo que les han presentado y se ha encontrado en el cestaño «pelotas similares a lo que ha habido durante todo el campeonato. Había pelotas que andaban más por arriba y otras que andaban más por abajo, pero todas dentro del límite. Creo que son pelotas pensadas para el frontón y no para las parejas que juegan por lo que creo que hay que felicitar a Martín [Alustiza]».

En cuanto a las claves de la final, ha habido cierta unanimidad al resaltar la importancia de comenzar bien el partido y en que, por mucho que sean los delanteros los que centren los focos, la final se decantará por un lado a poco que cualquiera de los cuatro no rinda a un buen nivel.