Los líderes de Donetsk y Lugansk se encaminan a Moscú para formalizar la anexión
El jefe de la República Popular de Donetsk, Denis Pushílin, y el líder de Lugansk, Leonid Pásechnik, se encaminan a Moscú para formalizar la anexión a Rusia del Donbass, Zaporiyia y Jerson.
Los líderes de las repúblicas de Donetsk y Lugansk se encuentran de camino a Moscú para formalizar la anexión a Rusia tras los referéndums celebrados en cuatro territorios en los que la mayoría de los votantes apoyaron la opción de anexionarse a Rusia.
«Tengo el documento, el protocolo (final de los referendos sobre la adhesión a Rusia) y ahora me dirijo a Moscú», ha dicho el jefe de la República Popular de Donetsk, Denis Pushílin.
También el líder de Lugansk, Leonid Pásechnik, ha informado de que se encuentra de camino a la capital rusa con el objetivo de finalizar las gestiones jurídicas para la incorporación del territorio en Rusia.
Entre el 87,05 y el 99,23% de los votantes en los referéndums en Donbass, Zaporiyia y Jerson apoyaron la anexión a Rusia, según los resultados difundidos por la autoridades prorrusas.
Donetsk por la anexión
El mayor apoyo a la anexión se registró en Donetsk, donde el 99,23% de los votantes habría respaldado la incorporación a Rusia.
La cifra fue ligeramente inferior en Lugansk, donde a favor de esta opción se pronunciaron el 98,42%.
En las regiones de Zaporiyia y Jersón a favor de la entrada en Rusia habrían votado el 93,11 y el 87,05% de los ciudadanos, respectivamente.
Doce días
Según el diario ruso Kommersant, el proceso de la anexión de los cuatro territorios a Rusia puede tardar doce días.
De acuerdo con las leyes rusas, el presidente Vladimir Putin, tiene que reconocer primero la independencia de Jersón y Zaporiyia antes de aprobar su adhesión a Rusia. La independencia de Donetsk y Lugansk ya fue reconocida por Moscú el 21 de febrero, tres días antes del inicio de la campaña militar en Ucrania.
El martes se supo que el Senado ruso planea debatir la anexión de los nuevos territorios el próximo 4 de octubre, aunque antes la incorporación tiene que recibir el visto bueno de la Duma o cámara baja rusa.
Una vez que ambas cámaras del Parlamento den su beneplácito, el respectivo documento será ratificado por Putin, lo que puede ocurrir el mismo día.