El Comisionado de la NBA Adam Silver intercede por el regreso de Kyrie Irving a las canchas

El «caso Kyrie Irving» no se ha cerrado y mientras el base de los Brooklyn Nets, apartado por la franquicia neoyorquina por «antisemita», ronde la órbita de la NBA, no se va a cerrar.

Reza el dicho que mala hierba nunca muere, y junto con la capacidad baloncestística del base, está su capacidad de generar polémicas porque sí. Su adscripción al «terraplanismo», su renuencia a vacunarse contra la covid-19 en aras de una «libertad individual» más defendible como egoísta que otra cosa –más que coherente con la sociedad en la que vive, por otro lado– no le ha impedido seguir jugando, convertido en un funambulista de la polémica, y más en una franquicia ideada para hacerse con el anillo pero más conocida en las últimas fechas por su errática marcha, así dentro como fuera del parqué.

Hasta que tocó la fibra sensible de la comunidad judía, muy potente e influyente en los Estados Unidos y en especial en Nueva York. Por ejemplo, conocida fue la anécdota de hace unos años, en un amistoso entre los New York Knicks y el Maccabi de Tel Aviv disputado en el Madison Square Garden, en el que un rabino saltó a la cancha para tratar de convencer al trío arbitral –y conseguirlo– de que no expulsaran al excéntrico –y conocido racista– técnico israelí Pini Gershon, después de una de sus míticas salidas de tono.

Irving fue suspendido por los Nets de empleo y sueldo durante al menos cinco partidos después de que promoviera una película antisemita en Twitter y se negara, inicialmente, a pedir perdón de manera explícita.

Tras conocer la sanción de los Nets, Irving presentó disculpas, después de varios días de evasivas constantes y piruetas verbales sobre esta polémica, aunque sigue apartado de su equipo en la NBA.

«A todas las familias y comunidades judías que están dolidas y afectadas por mi publicación, lamento profundamente haberos causado dolor y pido perdón», escribió en su disculpa.

Además, Nike anunció la semana pasada que suspendió su relación de patrocinio con Irving, que comenzó en 2011, al destacar que en su empresa no hay «sitio para discurso de odio».

Irving publicó en su cuenta de Twitter, con 4,5 millones de seguidores, un enlace de Amazon a la película «Hebrews to Negroes: Wake Up Black America» (2018).

Esta cinta está basada en un libro del mismo título publicado en 2015 que, según la revista Rolling Stone, incluye multitud de afirmaciones antisemitas como que «muchos judíos famosos han admitido que rezan a Satán o Lucifer».

En un rapto de desatino exacerbado, en su descripción de Amazon, la cinta –ya retirada– asegura «descubrir la verdadera identidad de los Hijos de Israel».

Pero el tema da para más, no en vano la NBA vive de sus audiencias y de la publicidad que genera el espectáculo y ahí Kyrie Irving todavía tiene tirón. Así las cosas, el Comisionado de la NBA Adam Silver, judío tal y como lo fue su antecesor, el difunto David Stern, aseguraba este jueves que está convencido de que Kyrie Irving no es antisemita pese a la notable polémica que ha provocado el base de los Brooklyn Nets en las últimas semanas.

«Personalmente, y basado en lo que me ha dicho directamente a mí, no tengo dudas de que no es antisemita», dijo Silver en una entrevista con The New York Times.

No obstante, el máximo responsable de la NBA, que se ha reunido con el jugador esta semana, señaló que Irving tiene que pasar por «un proceso» para cerrar este asunto antes de volver a las canchas.

«Sea o no antisemita no es relevante para el daño causado por publicar contenido de odio», resaltaba Silver en la citada entrevista.

También indicó que «lo más importante ahora» es que «el arrepentimiento» de Irving esa «verdaderamente auténtico y genuino».

Este jueves, LeBron James, compañero del base de los Nets así en los Cleveland Cavaliers como en la selección estadounidense, añadía que Irving ya ha pedido perdón y «debería poder jugar» de nuevo con los Nets.

«Ya os dije que no estoy a favor de la difusión de mensajes ofensivos. Y seguiré de esta manera, pero creo que Kyrie pidió perdón y debería poder jugar. Esto es lo que pienso. Así de simple», escribió LeBron en Twitter.