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La NWSL sanciona a cuatro entrenadores de por vida tras el informe por abusos

Paul Riley, Christy Holly, Rory Dames y Richie Burke no podrán volver a entrenar en la Liga estadounidense. Hay también multas millonarias para dos clubes y la propia Liga. En el Estado francés se hace público el «comportamiento inapropiado» de Noel Le Graët.

Paul Riley es uno de los cuatro entrenadores que no podrá volver a trabajar en la NWSL. (Maddie Meyer | AFP)

Cuatro semanas después de hacer público el informe que corroboraba el publicado anteriormente por la Federación de Fútbol de Estados Unidos, confirmando la «práctica sistémica» de irregularidades, abusos y agresiones sexuales en la NWSL, la Liga estadounidense ha anunciado la sanción de por vida a cuatro entrenadores. Se trata de Paul Riley, Christy Holly, Rory Dames y Richie Burke, que no podrán volver a entrenar en la NWSL. Se han establecido más sanciones, incluyendo multas millonarias a Chicago Red Stars y Portland Thorns.

Fueron precisamente las revelaciones de las exjugadoras Mana Shim y Sinead Farrelly en «The Alantic» sobre los abusos cometidos por Paul Riley cuando jugaban a sus órdenes en Portland Thorns las que dieron origen a las investigaciones. Para cuando se hizo público lo sucedido, el entrenador ya había trabajado otros cinco años en Western Ney York Flash y North Carolina Courage. Christy Holly, por su parte, fue despedido por el Louisville Racing tras las acusaciones de agresión sexual y tocamientos realizadas por una futbolista. En el caso de Rory Dames, entrenador de Chicago Red Stars durante casi una década, la investigación confirmó el abuso verbal continuado y las amenazas a sus jugadoras. Richie Burke, por último, fue despedido por Washington Spirit acusado de acoso y comportamiento abusivo.

Además, el exsegundo entrenador de Red Stars Craig Harrington y la exDirectora General del Gotham FC Alyse Lahue han sido suspendidos hasta 2025 de cualquier función relacionada con la NWSL, mientras Chicago Red Stars y Portland Thorns recibirán multas de 1’5 y 1 millón de dólares respectivamente por su conducta, que fue desde la negligencia ante los actos cometidos hasta su voluntad de encubrirlos. Entre 50.000 y 200.000 dólares deberán pagar Racing Louisville, North Carolina Courage, OL Reing y Gotham. La propia NWSL se ha sancionado a sí misma con al menos un millón de dólares al reconocer los «fallos sistémicos» que permitieron los abusos de forma continuada. Hay, además, otras seis personas que deberán «reconocer su conducta indebida y asumir la responsabilidad de la misma, participar en actividades de formación y demostrar un compromiso sincero de corregir su comportamiento» antes de poder volver a trabajar para la Liga.

La Comisionada de la NWSL Jessica Berman ha explicado que «como parte de nuestro compromiso con la rendición de cuentas y la disuasión», se ha considerado «apropiada y necesaria una mayor acción correctiva con respecto a ciertas organizaciones e individuos identificados» en la investigación y añadió que la Liga seguirá «dando prioridad a la implementación y mejora de las políticas, programas y sistemas que priorizan la salud y la seguridad de nuestras futbolistas».

El Sindicato de Jugadoras NWSLPA, que participó en la investigación de forma conjunta con la NWSL, considera que las sanciones «marcan un paso fundamental para responsabilizar a los clubes y responsables de los equipos por sus acciones o inacción, que comprometieron y traicionaron la seguridad de las jugadoras».

Le Graët

Lamentablemente, los abusos están a la orden del día en cualquier país. En Francia es el presidente de la Federación Noel Le Gräet el que está en el ojo del huracán y no precisamente por sus declaraciones sobre Zinedine Zidane.

La revista "So Foot" ya había denunciado comportamientos inapropiados de Le Graët, en particular mensajes de texto de carácter sexual, que el presidente de la Federación habría negado. Pero según informa France Press, existirá documentación que lo confirma y, además, «varias mujeres habrían denunciado» su «actitud». A eso se añade la entrevista concedida hoy a L’Equipe y RMC por la agente de futbolistas Sonia Souid, en la que confirma que también ha recibido mensajes, llamadas, invitaciones e insinuaciones. «Perdón por la expresión, pero cada vez que hablaba con él me daba la sensación de que la única cosa que le interesaban eran mis tetas y mi culo», ha llegado a decir Souid, que ha explicado que Le Graët le citó en su apartamento para una reunión de carácter profesional en la que supuestamente también debía participar la Secretaria General de la FFF Brigitte Henriques. «Cuando llegué, vi dos copas de champán llenas. Brigitte Henriques no llegaba y él dijo “sabes, no la necesitamos. Si ambos somos lo suficientemente cercanos, podré hacer realidad tus ideas”. No toqué las copas, tenía miedo de que hubiera algo», ha asegurado.

La minista francesa de Deportes Amélie Oudéa-Castera, que precisamente tiene previsto reunirse hoy con Le Graët con motivo de la auditoría realizada a la Federación, ha felicitado a Souid en su cuenta de Twitter «por la valentía de su testimonio. Nuestra auditoría estará a la altura».