«Cometimos muchos errores en la ida, está claro que no nos lo podemos volver a permitir»

Patricia Encinas ha vivido en primera persona el crecimiento deportivo de Replasa Beti Onak. Arriesgó fichando por un equipo recién ascendido –abandonó un trabajo indefinido por embarcarse en esta aventura– y ha competido de manera sana bajo palos durante dos temporadas con Olaia Luzuriaga, a la que le augura un gran futuro, pero recomendándole que se lo tome sin prisa. Su renovación todavía está en el aire.

¿Se va a Elche con la idea de que hay poco que perder y mucho que ganar?

Nosotras ya vamos con el trabajo hecho, son ellas las que tienen más que perder. Ahora bien, hay que hacer mejor partido que en la ida, en el que cometimos muchos errores que no nos podemos permitir ante ningún equipo, y mucho menos frente a un Elche que ha demostrado que es el principal candidato a ser campeón liguero y enfrentarnos a un equipo así es algo que halaga. Vamos con el objetivo de ganar y forzar la prórroga.

Como ha comentado, el rival es el máximo favorito al título, pero ¿se le puede sorprender?

Por supuesto que sí, pero haciendo las cosas bien durante todo el encuentro. En el penúltimo partido liguero de esta temporada que jugamos contra ellas en nuestra pista estuvimos por delante en el marcador hasta el minuto 25 y creo que les complicamos mucho la victoria.

¿Y cuál es la fórmula para jugar a un alto nivel durante los 60 minutos?

Hay que minimizar sus armas, como puede ser la segunda oleada, mediante la que meten muchos goles, y llevarles a un ataque posicional bastante largo, donde sufren más, porque tienen laterales muy potentes en el lanzamiento y a las que les gusta resolver cuanto antes. Además, contamos con la ventaja de que ya no valen los goles de la ida, solo sería necesario ganar para forzar la prórroga.

¿Tiene una motivación extra por jugar frente al que fue su equipo?

La verdad es que ya lo he hecho en varias ocasiones y suele ser especial la primera vez, después ya se pierde un poco esa sensación. De todos modos, allí viví una experiencia muy bonita porque fue el primer equipo en el que me atreví a salir de casa, tengo muy buenos recuerdos de las compañeras, el club, los entrenamientos y la ciudad. Cada año tienen más afición porque lo están trabajando muy bien a través de las redes sociales y este martes seguro que estará lleno el pabellón porque saben que es un partido importante.

«Al inicio de la temporada, cuerpo técnico y plantilla nos marcamos el objetivo de entrar en el playoff, sabíamos que podía estar a nuestro alcance»

Ocurra lo que ocurra, el premio ya es poder disputar este playoff y haber evitado el playdown, ¿no?

Sí, pero el equipo quiere más. Es cierto que el año pasado fue de adaptación a la nueva categoría, a la forma de jugar, que es distinta respecto a un nivel inferior. Sin embargo, al inicio de la actual temporada el cuerpo técnico y la plantilla nos marcamos el objetivo de entrar en el playoff, sabíamos que podía estar al alcance de nuestra mano. Ahora que lo hemos conseguido, el equipo está motivado para hacer más e intentar ganar el partido en Elche.

¿Cómo se vivió el momento en el que se logró la permanencia?

Cuando Málaga ganó a Rocasa, salimos todas corriendo de casa para recorrernos toda Villava celebrando que nos habíamos mantenido. A diferencia del año pasado, la recompensa a las muchas horas de trabajo nos ha llegado antes, sin necesidad de vivir una última jornada de infarto. Para mí, resultaron claves los dos puntos que logramos en la victoria frente al Aula Valladolid, un gran equipo.

Es indudable el crecimiento deportivo de Beti Onak, ¿lo ve como un club con una prolongada estancia en Primera?

Ha demostrado que quiere ser ambicioso, renovando a gran parte de la plantilla y realizando fichajes que han mejorado el equipo, una de las claves creo que ha sido mantener al máximo número de jugadoras durante más de un año. Está claro que quiere dar un paso adelante cada año, consolidarse en la Liga Guerreras, creer en que podemos tener grandes resultados y, quién sabe, si el año que viene dar una nueva sorpresa, metiéndose por ejemplo dentro de las ocho finalistas de la Copa.

¿Hay otras claves que puedan explicar dicho crecimiento?

Ha sido muy importante la llegada de jugadoras que no solo aportan a nivel deportivo, sino que tienen un carácter en la pista que se transmite a la grada, una experiencia que suele dar muchos puntos. Por ejemplo, Mariana Costa es una jugadora que tiene mucho talento y mucho carácter dentro de la cancha, que anima al pabellón y que aporta algo diferente, lo que hace que el equipo crezca.

En su caso particular, tiene una dura competencia en la portería, con una Olaia Luzuriaga en constante progresión y un interesante futuro por delante. ¿Cómo es su relación?

Reconozco que soy una friki del balonmano y antes de recalar en un equipo, me gusta informarme previamente sobre el club y la plantilla. Me hablaron muy bien de Olaia y la verdad es que nuestra relación es maravillosa, como me ha ocurrido habitualmente con otras compañeras con las que he compartido vestuario. Creo que la portería de Beti Onak está bien cubierta, porque Miguel (Etxeberria) puede elegir a dos guardametas con características diferentes, unas vienen bien frente a algunos rivales y otras ante otros.

¿Ve a su compañera jugando a futuro en un equipo con mayores aspiraciones?

Bueno, acaba de renovar y creo que se trata de una buena decisión porque, aunque tiene mucha proyección y futuro, además de ser muy trabajadora, siempre le aconsejo que debe mentalizarse para jugar en su casa muchos minutos y durante varias temporadas, para salir fuera siempre hay tiempo. Creo que está preparada para vivir la experiencia de jugar en otro equipo, pero mi recomendación es que continúe aquí mucho más tiempo.

Comenta que se complementan bien bajo palos, pero que siga este dueto está en el aire porque se acaba su contrato con Beti Onak.

Hemos hablado lógicamente, pero no es algo que me compete solo a mí, sino también al club, prefiero esperar a ver qué es lo que quiere. Está claro que a mí me gustaría quedarme, porque se trata de un club muy profesional, tanto en lo que se refiere al cuerpo técnico, como a los preparadores físicos o readaptadores, y que te da muchas facilidades, pero depende de muchas cosas. Pase lo que pase, siempre le voy a estar agradecida a Beti Onak por todo lo que me ha dado y haber seguido manteniendo mi ilusión por jugar a este deporte.

¿Y cómo fue en su momento la decisión de venir aquí?

Como he comentado, antes de tomarla siempre me informo muy bien del club y de lo que hay alrededor, porque el mundo del balonmano es muy pequeño y hay amistades por todos lados. Sin embargo, cuando me llamó Beti Onak me vendieron muy bien el proyecto, sin entrar tanto en aspectos económicos y más en deportivos, como el hecho de que se iba a mantener el bloque, que se quería ir creciendo, y todo eso fue definitivo para que me decidiese. De hecho, dejé un trabajo indefinido para venir aquí y es algo de lo que no me arrepiento.

«Aunque soy muy exigente conmigo misma, estoy contenta con mis actuaciones, habida cuenta de que existe mucha competencia en la portería»

¿Qué valoración realiza a nivel personal de la presente campaña?

Aunque soy muy exigente conmigo misma, estoy contenta con mis actuaciones, habida cuenta de que existe mucha competencia en la portería, con una gran compañera que está a un enorme nivel. Por eso, no siempre es posible jugar todos los minutos que quieres, pero los que he disputado he dado el cien por cien. Al final, de lo que se trata es de que el equipo gane.

Su otra faceta deportiva es el balonmano playa, ¿cómo llegó a esta modalidad?

Pues por la insistencia de Pedro Moreno, el técnico del club de mi vida, el Getasur, que combinaba ambas modalidades. Él me llevó a mi primer torneo de balonmano playa y, sin entrenar, se me dio bastante bien, hasta el punto que ya entonces me vaticinaron que iba a acabar en la selección. Así que me entró el gusanillo hasta hoy y le agradezco mucho la obstinación que tuvo conmigo.

¿Tan diferente es la playa de la pista?

Es más exigente físicamente porque, aparte de la superficie, hay que estar haciendo cambios continuos con cada ataque, aunque duren menos tiempo las partes. En todo caso, no hace falta específicamente una playa para poder entrenar.

Y en estos próximos Juegos Olímpicos de París va a ser una disciplina de exhibición.

No sé muy bien qué dinámica de competición se va a desarrollar, pero yo ya sé que estoy seleccionada para un equipo de all-stars. A nivel mundial, el balonmano playa está pisando fuerte en los últimos años y desde la Federación se le está dando un fuerte impulso. Además, que esté en las Olimpiadas, aunque sea como exhibición, ya es un gran paso.

Participar en unos Juegos Olímpicos no es algo que esté al alcance de todos los deportistas.

Cuando me llamaron para decirme que iba a jugar en París, me puse a llorar. Vamos a poder vivir una experiencia única, rodeadas de un ambiente deportivo muy especial.