Volver a Miribilla es el escudo de un mermado Bilbao Basket para superar a Zunder Palencia

Según Jaume Ponsarnau, los hombres de negro han completado una mala semana de entrenamientos por la falta de «tono» en la preparación. Se enfrentan a las 18.00 a un rival ya descendido, en un duelo en el que las «motivaciones» pasan a ser más individuales que colectivas, a falta de otros objetivos.

El duelo que Surne Bilbao Basket y Zunder Palencia juegan esta sábado a las 18.00 en el Bilbao Arena no es fácil ni para los equipos ni para los espectadores. Zunder Palencia certificói su descenso el pasado sábado luego de caer por 94-101 ante Saski Baskonia, mientras que la idea de Bilbao Basket de optar a la décima plaza se esfuma, en buena medida porque los problemas físicos han dejado en cuadro a los hombres de negro.

En vista de ello, el técnico Jaume Ponsarnau ha sido honesto en su alocución previa al indicar que «el tono» de la semana de entrenamientos no ha sido de su agrado para nada, pero ha querido subrayar la importancia de jugar en Miribilla para no sentirse solos y valerse del empujón de sus seguidores para recuperar ese tono y buscar la decimocuarta victoria del curso.

«No soy un entrenador que viene a vender los mundos de Yupi. La realidad es que no estamos bien y que jugamos contra un rival con más potencialidad que nosotros, pero vamos a apelar a que jugamos en casa. Esa es la ambición que quiero transmitir al equipo», ha recalcado el técnico de Tárrega.

El equipo vizcaino afronta este partido con las bajas de Adam Smith, operado esta semana del tendón de Aquiles derecho, y de Keith Hornsby, que «avanza bien» de su lesión muscular y podría incluso participar en alguno de los últimos partidos de la temporada frente a Manresa y el Barça.

Además, Denzel Andersson, también mermado, trabaja a menor ritmo para poder ayudar al equipo en los partidos, Xavi Rabaseda ha presentado esta semana un proceso vírico y Alex Renfroe ha sufrido también «un pequeño percance», según ha desvelado Ponsarnau. Todos ellos, sin embargo, estarán en principio disponibles.

«Que se lesionen tres jugadores en un partido –Smith, Hornsby y Andersson hace dos semanas contra el Obradoiro– es un accidente muy grave, pero que fuera en un momento en el que los deberes estaban hechos es muy significativo de la buena temporada que hemos hecho. Estamos contentos, pero queremos más y queremos acabar bien», ha incidido el preparador catalán, que sigue con su discurso de que «el futuro se construye en el presente», para evitar que sus jugadores se relajen más de la cuenta en esta recta final.

A pesar de los problemas para completar entrenamientos de calidad que ha encontrado esta semana a causa de esos problemas físicos que «condicionan el tono del trabajo, y sin más objetivo clasificatorio que alcanzar una décima plaza que tienen muy complicada, Ponsarnau intenta mantener el optimismo porque «la intención del grupo está siendo buena».

«Las intenciones han estado, pero en Girona por ejemplo nos faltó fuerza y calidad. El equipo no tiene que estar de vacaciones y en la mentalidad de los jugadores no está esa idea. Pero las circunstancias han afectado para no poder hacer un buen trabajo y ahí me achaco la parte de responsabilidad que tenga yo», ha añadido, echándose la responsabilidad de esa «falta de tono» a sus espaldas.

Respecto a su rival cree que, aunque el Palencia «como equipo ha perdido motivación» después de sellar su descenso, «cada jugador» del equipo entrenado por Luis Guil «tiene muchísimas motivaciones», en referencia a que estos partidos van a servir también de escaparate para ganarse un contrato de cara a la próxima campaña.

«Debemos pensar que nos vamos a encontrar a un equipo más liberado y con jugadores que van a buscar su momento. Si queremos tener opciones tenemos que respetar a un rival que vendrá a darlo todo. Tienen un 'cinco' –en referencia al pívot letón Pasecniks– que está al nivel de los mejores de la liga y tienen pólvora», ha explicado Ponsarnau, consciente de la derrota cosechada en diciembre en la cancha palentina, cuando la gran actuación de Pasecniks supuso un resultado adverso de 78-72.

«Palencia es muy táctico en defensa. Utiliza zonas de diversos tipos y vamos a intentar que eso no nos pare el ritmo ofensivo. Tenemos que tratar de ser sólidos desde la defensa y correr», ha recalcado el técnico de los hombres de negro, buscando en las canastas fáciles la forma de huir de un ataque a media pista que en estos momentos, dadas las ausencias y de las características de los ausentes, complica sobremanera el modo de sumar puntos en el cuadro bilbaino.

61 clubes vinculados

En otro orden de cosas, Bilbao Basket escenificará en los prolegómenos del encuentro ante Zunder Palencia la firma del convenio con 61 clubes para convertirlos en convenidos; 58 clubes vizcainos, dos cántabros –Castro Basket y CB Laredo– y uno de alavés –Sugarrak Laudio– se reunirán tras haber firmado este convenio de colaboración con el club bilbaino. Gracias a ello, más de 10.000 deportistas estarán bajo el radar de Bilbao Basket, facilitando su incorporación a las categorías inferiores del club.

Además, Bilbao Basket ofrecerá a los entrenadores, técnicos y directivos de dichos clubes formación profesional en el ámbito deportivo. Esto incluye asesoramiento en formaciones técnicas, tácticas y físicas para todo el staff y la dirección de los clubes vinculados.

El acuerdo se pondrá de largo entre el primer y segundo cuarto del partido ante Zunder Palencia, cuando representantes de los clubes vinculados saltarán a la cancha para inmortalizar el momento con una foto de familia.

En el apartado práctico, ya el 18 de este mestendrá lugar en las instalaciones de Artxanda la primera de las formaciones para entrenadores y staff dirigidas a los clubes vinculados.