Amorebieta, el último esfuerzo y el más necesario
El Amorebieta visita al Mirandés con la ilusión de culminar su remontada y la obligación de confirmarla con una victoria para seguir en Segunda.
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Cuando la temporada llegó a su ecuador, Amorebieta y Cartagena cerraban la clasificación y parecían desahuciados. Ocho puntos les separaban de la salvación tras haber ganado apenas tres partidos en 21 jornadas. Pero una vuelta es muy larga, sobre todo en Segunda, y los dos equipos han aprovechado la oportunidad que les ofrecía esta categoría maratoniana: el Efesé aseguró la permanencia en la antepenúltima jornada y el equipo vizcaino no solo llega vivo, sino además dependiendo de sí mismo, al último partido.
A los azules, que en la segunda vuelta han duplicado los puntos que consiguieron en la primera, les toca realizar un último esfuerzo para culminar su remontada. Y lo harán, precisamente, contra el equipo que les precede en la clasificación y el único al que pueden atrapar. Un Mirandés que les aventaja en un punto –y tiene el golaverage en contra tras caer en la primera vuelta en Lezama con un doblete de Edwards– y que ha dibujado la trayectoria opuesta a la del Amorebieta. Porque el equipo rojillo se comió las uvas en una comodísima 13ª plaza, que casi le invitaba más a ilusionarse con el play-off, del que solo le distanciaban cinco puntos, que a preocuparse por cumplir el objetivo de la permanencia, con seis puntos de colchón entonces sobre el descenso y trece sobre los vizcainos. Si a puntos sigue ganando, por la mínima, el equipo de Alessio Lisci, no cabe duda de que la confianza recae del lado de un Amorebieta que se ha ido sintiendo cada vez más capaz de merecer el premio que se le resistió en su debut en la categoría hace dos temporadas.
Si la buena noticia es que la permanencia está en sus manos, la mala es que solo le vale la victoria. Aunque la obligación también le evita dudas porque tiene que salir a ganar, sin especulaciones, al contrario de un rival que se debatirá entre las intenciones más ambiciosas de su entrenador –«tenemos que salir a ganar, no podemos estar jugando con el empate», anuncia Lisci– y la tentación del cerrojazo, que puede hacerle el partido muy largo. «Nuestro plan de partido, que es como siempre salir a ganar, no cambia –responde Jandro–. Cada partido es diferente, con sus matices, pero la idea es la misma».
No hay nervios, o los disimula bien, en el técnico asturiano pese a que el encuentro de Anduva es «una final. A todos nos gustaría jugar la de Champions o una final por el ascenso pero esta también es una final que vamos a recordar siempre pase lo que pase. A los futbolistas les gusta jugar estos partidos y están muy preparados», afirma Jandro aunque asegura que el Amorebieta afronta el partido, del que depende su continuidad en el fútbol profesional, «desde la normalidad».
El entrenador asturiano cuenta con las únicas bajas de Troncho y Garreta, mientras por parte del Mirandés causarán baja los lesionados Baeza, Pablo Ramón y Barcia y, por sanción, Barbu.
MIRANDÉS
Once inicial: Ramón Juan; Chaira, Verdasca, Tachi, Pablo Tomeo, Jonathan Gómez; Lachuer, Reina, Carlos Martín; Gabri y Javi Martón.
Bajas: Baeza, Pablo Román y Barcia, lesionados; y Barbu, sancionado.
AMOREBIETA
Once inicial: Magunagoitia; Álvaro Núñez, Bustinza, Etxeita, Gayá, Lasure; Sibo, Morán; Dorrio, Morcillo; y Jauregi.
Bajas: Troncho y Garreta, lesionados.
Árbitro: Orellana Cid (Andalucía).
Estadio: Municipal de Anduva.
Hora: 18.30 (LaLiga Hypermotion TV).